Banco Santander estaría reconsiderando su presencia en el Reino Unido y podría salir del mercado mientras enfrenta retornos más bajos en relación con otros mercados, según una información adelantada por Financial Times este fin de semana.
El banco que preside Ana Botín está explorando una serie de opciones, incluida la de quedarse con el negocio, y no hay acuerdo inminente, según publica el diario británico, que cita fuentes conocedoras del tema. Banco Santander también está lidiando con el efecto de una sentencia de un tribunal británico sobre los préstamos para automóviles.
No obstante, Banco Santander ha negado esta información. “El Reino Unido es un mercado fundamental para Santander y esto no ha cambiado”, dijo el sábado a Reuters un portavoz en un correo electrónico.
“Es normal que Banco Santander explore alternativas para mejorar la rentabilidad y/o el perfil de riesgo de su franquicia en Reino Único, pero vemos poco probable una operación corporativa”, apunta en la misma línea Rafael Alonso, analista de Bankinter.
Santander UK tiene una rentabilidad/RoTE inferior al grupo (11,1% vs 16,2% en 9M 2024) debido a la presión en márgenes y una ratio de eficiencia (costes/ingresos) elevada (56,0% vs 41,7% grupo). “A pesar de esto, las perspectivas para 2025 no son malas con tipos altos durante más tiempo y un alivio en las exigencias regulatorias por parte del BoE”, cree el experto.
En definitiva, “lo más probable es que Banco Santander trate de avanzar más rápido en sus planes de eficiencia (ahorro en costes) y/o reducción de riesgos/APRs para mejorar en rentabilidad/RoTE”, concluye Alonso.
El banco reservó 295 millones de libras esterlinas el año pasado para amortiguar posibles costos y pagos legales después de que las autoridades del Reino Unido ordenaran una investigación regulatoria a nivel de la industria sobre la presunta venta fraudulenta de préstamos para automóviles.
El banco se convirtió en un nombre conocido en el Reino Unido con su adquisición en 2004 de la sociedad de crédito hipotecario Abbey National, en una operación que, según el entonces presidente, Emilio Botín, “reforzaría nuestra franquicia paneuropea”.
En los últimos años, Santander ha recortado el tamaño relativo del negocio británico: los activos ponderados por riesgo en Reino Unido han estado cayendo desde alrededor del 14,7% del total del grupo en 2018 hasta cerca del 12,7% en el primer semestre de 2024.
Potencial en Bolsa
Las acciones de Banco Santander suben un 0,96% a media mañana en el IBEX 35 hasta marcar 4,84 euros. El valor ha acumulado una subida de un 36% en el último año, poniendo de referencia los 3,563 euros de sus mínimos del 30 de enero del año pasado. Se encuentra un 1,7% por debajo de los máximos de las últimas 52 semanas, que se remontan al 29 de abril del año pasado, en 4,928 euros.
Los analistas confían en que continúe la tendencia alcista en el largo plazo. Según los datos recopilados por Reuters, de media dan a Banco Santander una recomendación de ‘comprar’ y un precio objetivo medio de 5,72 euros que supone un potencial alcista de un 18,18% frente a los niveles actuales.