Banco Santander ha obtenido en 2022 un beneficio de 9.605 millones de euros con un aumento, en su beneficio atribuido del 18%. Y aunque no se han detenido demasiado en el tema del dividendo, lo cierto es que aumento el dividendo en efectivo por acción un 16%, según destaca la entidad. Como saben, la idea del banco cántabro es repartir, como es intención del consejo, en torno al 40% de su beneficio ordinario en este concepto, mitad en efectivo y mitad en recompra de acciones, en torno a un 20% para cada uno.
Aunque establecen, en su letra pequeña que la aplicación de la política de remuneración está sujeta a futuras decisiones internas y aprobaciones regulatorias. El primer dividendo a cuenta de 2022 ya se hizo efectivo el pasado 2 de noviembre – más de 1900 millones- y superior al de 2021 en un 16%, y se completó, el 31 de enero un programa de recompra de acciones de hasta 979 millones de euros.
De esta forma, señala la compañía, si se aplica la misma ratio de reparto de dividendo en el segundo pago contra los resultados de 20222, el dividendo en efectivo por acción total de 2022 aumentaría el 16% en comparación con el año anterior y la rentabilidad equivalente del dividendo más la recompra de acciones estaría por encima del 8%. En los dos últimos años, Santander ha recomprado el 5% de sus títulos con los programas de recompra de acciones. Aunque de todo ello tendremos más novedades el 28 de este mes, en Londres, cuando se celebre el Investor Day de Santander.
En el caso de BBVA es uno de los grandes alicientes en esa presentación de resultados. La parte del beneficio dedicado al pago al accionista alcanzará el 47% del beneficio atribuido. Eso significa un reparto por acción de 50 céntimos de euro, 43 en efectivo, que supone una mejora del 39% y un nuevo programa de recompra de acciones.
En este último caso se trata de una inversión en compra de acciones propias de 422 millones de euros, lo que supone el 1,1% de la capitalización del BBVA que equivale a 7 céntimos de euro en total y que cierra la remuneración al accionista. En cuanto a las fechas clave para el cobro del dividendo, recuerden que el primero a cuenta de 12 céntimos se hizo efectivo el pasado mes de octubre y que el segundo, de mayor cuantía, 31 céntimos, se pagará en abril de este año.
Para Banco Sabadell otro de sus grandes logros, en su presentación de resultados, es el aumento del pay out, la proporción del beneficio destinado al pago de dividendos que alcanzará el 50%, con lo que la entidad que preside Josep Oliú. Un dividendo en efectivo de 225 millones de euros, junto con la recompra de acciones por valor de 204 millones de euros, otra forma de retribución para los accionistas, que representa un 4% de la capitalización bursátil actual.
Según el banco, todo el conjunto ofrece una rentabilidad por dividendo del 8,7%. Así, tras el pago de diciembre, se pagará antes de la Junta el complementario con cargo a los resultados del pasado ejercicio por valor de 2 céntimos por acción. El dividendo en efectivo se eleva por tanto un 33% y alcanza por sí solo una rentabilidad del 4,5%.
Y Caixabank pone sobre la mesa parte de esos 9.000 millones de euros en dividendos que pagará desde 2022 a 2024, entre los que incluye la recompra de acciones por valor de 1.800 millones de euros, tal y como consta en su Plan Estratégico. De facto, su pay out, el montante del beneficio que destinará a dividendos pasa por repartir un 55% del total, con un total de 1.700 millones de euros a repartir.
El Consejo de Administración celebrado la semana pasada proponía a la Junta el pago de un dividendo de 0,2306 céntimos de euros brutos por acción con cargo a los resultados de 2022, que se abonarán, de momento sin más detalle, en el segundo trimestre de este año. Y para el ejercicio 2023 habrá distribución en efectivo de entre el 50 y el 60% del beneficio neto consolidado pagadero en un único pago en abril de 2024.
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