BBVA explicó que al cierre del primer semestre alcanzó una ratio de capital CET1 'fully loaded' del 11,52 %, y una rentabilidad sobre recursos propios (ROE) del 10,2 %, frente al 9,9% del primer trimestre, el 11,5% al cierre del ejercicio 2018 o el 12,2% obtenido a cierre del primer semestre de 2018. 

De esta manera, el banco logró entre enero y junio elevar sus ingresos y reducir costes, pero el alza de las provisiones en EEUU, Turquía y México penalizó sus ganancias. Los beneficios, pese la reducción del 3,7%, batieron las previsiones de los analistas y entre los grandes bancos del Ibex 35 es la entidad que mejor mantiene el beneficio. 

Los analistas revisan el precio objetivo de BBVA tras sus resultados y el escándalo por Villarejo

Con todo, la firma de análisis alemana Independent Research Gmbh ha ajustado un 7% su precio objetivo desde los 5,6 euros hasta los 5,2 euros por acción, lo que le da un potencial desde sus precios actuales del 12%. La firma estadounidense CFRA todavía es más severa con BBVA y le baja la valoración desde los 4,5 euros hasta los 4,2 euros por acción, lo que supone un ajuste del 6,6% y un potencial bajista del 9,6%. 

Citigroup, por su parte, ha revisado el precio objetivo que le daba al alza al pasar de 5,9 euros a 6 euros por acción, con un potencial del 29% desde sus precios a los que cotiza en el Ibex 35 este jueves

 

El consenso de los analistas mantiene en BBVA la recomendación de mantener, con un precio objetivo medio de 5,7 euros con un posible recorrido alcista del 23%. Hasta diez firmas de análisis aconsejan comprar BBVA, otras diez apuestan por mantener y cuenta también con nueve consejos de venta. 

Las acciones de BBVA acumulan un alza del 3% anual, retrocede un 19% desde los máximos de abril en línea con el sectorial bancario europeo que se deja un 17% y y Santander que corrige desde entonces un 16%. Este jueves las acciones del banco de origen vasco suben medio punto porcentual hasta los 4,6 euros. 

El mercado, hasta el momento, no está castigando a la entidad por la imputación que ha hecho el juez de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, por presunto cohecho, revelación de secretos y corrupción en los negocios dentro del llamado 'caso Villarejo'. El BBVA, que contrató los servicios del comisario de Policía José Manuel Villarejo entre 2004 y 2017, defiende que su imputación no es una "acusación formal". 

Ayer durante la presentación de los resultados de la entidad, su consejero delegado Onur Genç reconoció daños en la reputación del banco, prometió reforzar los procesos internos y se abrió a profundizar en el informe de investigación que ha llevado a cabo BBVA.