Repsol ha presentado sus resultados del ejercicio 2024, que arrojan un resultado neto de 1.756 millones de euros en 2024, un 45% menos que el año anterior, según ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El resultado ajustado se situó en 3.327 millones de euros, un 34% menor al de 2023.
La petrolera explica que los resultados de 2024 estuvieron influidos por “un contexto geopolítico complejo, menores precios del crudo, del gas y de la electricidad, márgenes moderados en el refino y bajos en la química”. En este escenario, “el desempeño de la compañía permitió mejorar la retribución a los accionistas y mantener un esfuerzo inversor alineado con la visión estratégica”, señala.
El resultado neto de la compañía recoge el impacto negativo (-450 millones de euros en 2024) del Gravamen Temporal Energético en España, medida fiscal que fue rechazada en las Cortes Generales. En lo que respecta a las ventas de combustibles para el transporte por carretera, en los últimos meses de 2024 se observó un repunte impulsado por las medidas regulatorias antifraude y los mecanismos de control adoptados en España, que estabilizaron el mercado. Como consecuencia, las ventas de estos productos aumentaron en un 6% en el cuarto trimestre, en comparación con el mismo período de 2023.
El EBITDA de 2024 se situó en 7.488 millones de euros, con una caída de un 19,1% frente a los 9.254 millones del ejercicio anterior.
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Con todo ello, Repsol fue capaz de generar la suficiente caja para mejorar la retribución de sus accionistas y mantener un esfuerzo inversor alineado con la actualización estratégica 2024-2027, con unas inversiones netas de 5.700 millones de euros durante el ejercicio.
Además, en el último trimestre redujo en 524 millones su deuda respecto al cierre de septiembre. Por su parte, la liquidez se situó al final del año en 9.453 millones (incluyendo las líneas de crédito comprometidas no dispuestas), lo que supone 3,51 veces los vencimientos de deuda bruta a corto plazo.
Durante el pasado ejercicio Repsol avanzó en la implementación de su actualización estratégica 2024-2027, que permite seguir creciendo “de forma rentable, aprovechar las múltiples oportunidades que ofrece la transición energética y cumplir con sus ambiciosos objetivos de descarbonización”.
Dividendo y recompra de acciones
Repsol abonó un dividendo de 0,90 euros brutos por acción, aproximadamente un 30% superior al de 2023, y redujo capital mediante la amortización de 60 millones de acciones propias. Con todo ello, empleó 1.928 millones de euros en la retribución a sus aproximadamente 500.000 accionistas, en su gran mayoría minoristas y residentes en España.
La compañía ha anunciado el abono de un dividendo complementario, con cargo a 2024, de 0,5 euros por acción, a cobrar en este próximo verano. Junto al primer dividendo, liquidado en enero, de 0,475 euros, que representaba un incremento de casi el 19% con respecto a los 0,40 euros del primer pago de hace un año, la retribución vía dividendo con cargo a 2024 ascenderá a 0,975 euros por título, lo que supone un 8,3% más que el dividendo de 0,9 euros en total pagado a lo largo del ejercicio anterior.
Además, el grupo procederá a recompras de acciones por un mínimo de 700 millones de euros en 2025. En este sentido, el consejo de administración de la compañía propondrá a la junta general de accionistas una reducción de capital de acciones a ser adquiridas por una cantidad equivalente a 350 millones de euros, de los cuáles 300 millones de euros se obtendrán a través de un programa de recompra de acciones y 50 millones de euros a través de la liquidación de derivados existentes, que se espera sea ejecutado antes de finales de julio.