Caixabank ha obtenido un beneficio neto atribuido de 2.137 millones de euros en el primer semestre de 2023, lo que supone un incremento del 35,8% en comparación con el mismo periodo del año anterior (1.573 millones).
En el primer semestre, los ingresos core crecen un 31,3% en tasa interanual, hasta alcanzar 7.110 millones de euros. Destaca la evolución del margen de intereses, que se sitúa en 4.624 millones de euros, un 55,2% más que un año antes. El crecimiento del margen de intereses unido a la mejora del resultado del servicio de seguros (+18,5%) y de los ingresos de participadas de bancaseguros (+59,2%), compensan la caída de las comisiones de un 4,2%. En concreto, las comisiones bancarias recurrentes muestran una reducción interanual del 7,6%, impactadas, fundamentalmente, por la supresión de las comisiones de custodia de depósitos de grandes empresas.
Respecto a los ingresos por dividendos, se sitúan en 145 millones de euros en el semestre, cifra que incluye el de Telefónica por 61 millones de euros en el primer trimestre y el de BFA por 73 millones de euros en el segundo. Además, los resultados atribuidos de entidades valoradas por el método de la participación suman otros 145 millones, con un incremento interanual del 30,5%.
Por su parte, el resultado de operaciones financieras se sitúa en 143 millones de euros en 2023, frente a los 244 millones del año anterior (-41,5%).
De esta manera, el margen bruto entre enero y junio alcanza 6.673 millones de euros, con un incremento del 23,1% respecto al mismo periodo del año anterior.
Con todo ello, la positiva evolución del Grupo durante el semestre ha permitido alcanzar una rentabilidad ROE del 10,2%. Además, la ratio de eficiencia recurrente (sin incluir gastos extraordinarios) vuelve a bajar hasta colocarse en el 45,7%.
El consejero delegado, Gonzalo Gortázar, ha destacado la buena evolución de CaixaBank durante el primer semestre “que se apoya en una dinámica comercial muy positiva, en la plena consecución de las sinergias derivadas de la integración con Bankia y en la reducción de los saldos dudosos”. “En un contexto de normalización de tipos de interés, los márgenes avanzan de forma significativa, con un resultado atribuido de 2.137 millones, un 35,8% más. Este sólido resultado es consecuencia de la buena marcha de la actividad comercial, así como de la gestión prudente del riesgo de crédito, y sitúa nuestra rentabilidad sobre fondos propios en niveles del 10% tras un largo periodo de rentabilidades muy bajas”, ha señalado el ejecutivo.
Recursos y créditos
En el primer semestre del año, CaixaBank ha conseguido incrementar los recursos de clientes, que se sitúan en 627.824 millones de euros a 30 de junio (+2,7% en el año), gracias a la estacionalidad habitual positiva del ahorro a la vista a finales del segundo trimestre y la buena evolución en los productos de ahorro a largo plazo.
Los activos bajo gestión se sitúan en 156.111 millones de euros (+5,5% en el año) por la evolución favorable de los mercados y las suscripciones netas positivas. En detalle, el patrimonio gestionado en fondos de inversión, carteras y sicav’s alcanza los 111.340 millones (+6,4%) y los planes de pensiones 44.771 millones (+3,4%).
En los primeros seis meses, las suscripciones netas de fondos de inversión, planes de pensiones y seguros de ahorro llegan a los 5.100 millones de euros. La cuota de mercado combinada de depósitos y ahorro a largo plazo se sitúa en el 26,5%.
En cuanto a la cartera de crédito sana de CaixaBank, cierra el primer semestre del año en 354.199 millones de euros, después de crecer un 0,8% en el año. El crecimiento sostenido en la cartera de crédito a empresas (+2,2%) y la buena evolución del crédito al consumo (+1,2%) ha compensado el mayor desapalancamiento en crédito de adquisición de vivienda, con una reducción de la cartera del 2,6%.
Respecto a la nueva producción, en el primer semestre del año se han concedido 21.026 millones de nuevo crédito a empresas, 5.172 millones en consumo y 4.654 millones en hipotecas.
Morosidad en mínimos por la óptima gestión del riesgo
La morosidad vuelve a bajar en la entidad y se sitúa en el 2,6% a 30 de junio, el mejor dato de los últimos 15 años, (frente al 2,7% del trimestre anterior y el 3,2% de un año antes). Los saldos dudosos descienden hasta los 10.317 millones de euros tras la buena evolución de los indicadores de calidad de activo y la gestión activa de la morosidad, lo que supone 373 millones menos en el año.
Por su parte, los fondos para insolvencias se sitúan a cierre de junio de 2023 en 7.880 millones de euros y la ratio de cobertura se incrementa hasta el 76% (7.867 millones y 74% a cierre de 2022, respectivamente). El coste del riesgo sigue moderado y se sitúa en el 0,27% -últimos 12 meses-.
CaixaBank dispone de un fondo colectivo de provisiones que asciende a 874 millones de euros a 30 de junio. El referido fondo colectivo ha disminuido en 264 millones, principalmente por el proceso de recalibración semestral de los modelos que se ha llevado a cabo en el último trimestre, al haberse distribuido parcialmente mediante la asignación de provisiones a nivel específico; sin alterar, por tanto, su nivel global de cobertura (el saldo del fondo ascendía a 1.137 millones de euros a cierre de 2022).
Liquidez y capital
A cierre del semestre, CaixaBank mantiene una sólida posición de liquidez y capital. Los activos líquidos totales llegan a los 146.646 millones de euros a 30 de junio, lo que supone un incremento de 7.636 millones en el año. El saldo dispuesto de la póliza del Banco Central Europeo (BCE) a cierre del semestre es 8.477 millones correspondientes a TLTRO III, ya que en el segundo trimestre de este año se ha producido una amortización ordinaria por un importe de 7.143 millones de euros.
El Liquidity Coverage Ratio del Grupo (LCR) a 30 de junio es del 207%, lo que muestra una holgada posición de liquidez.
Respecto al capital, la ratio CET1 es del 12,5% (12,4% sin aplicación de los ajustes transitorios de NIIF9), tras el impacto extraordinario de la primera aplicación de la normativa NIIF17 que restó 20 puntos básicos. Pese a ello, destaca una vez más la capacidad de generación de capital de la entidad, pues la evolución orgánica del primer semestre es de 91 puntos básicos.
Compromiso con los objetivos de remuneración al accionista
CaixaBank avanza en este semestre en la consecución de los objetivos del Plan Estratégico 2022-2024, entre los que se encuentran generar alrededor de 9.000 millones de euros de capital y una retribución atractiva para el accionista.
La entidad ha comunicado la intención de realizar una nueva recompra de acciones por un importe total de 500 millones de euros, sujeta a la aprobación regulatoria preceptiva, que se prevé comience antes de finales de 2023.
Se trata de la segunda recompra de acciones en el marco del Plan Estratégico, ya que entre mayo y diciembre de 2022 se llevó a cabo un programa de recompra de acciones por valor de 1.800 millones de euros.
Además, el pasado 12 de abril, la entidad abonó a sus accionistas 0,2306 euros por acción. Con el pago de este dividendo, el importe de la remuneración al accionista correspondiente al ejercicio 2022 ascendió a 1.730 millones de euros, equivalente al 55% del beneficio neto consolidado de ese año. En lo relativo a la política de dividendos para el ejercicio 2023, el Consejo de Administración aprobó en febrero una distribución en efectivo de entre el 50% y el 60 % del beneficio neto consolidado, que se abonaría en un único pago durante abril de 2024, sujeto a la aprobación final de la Junta de Accionistas.