Tras los pasos de Bill Gates caminarán “otros dos grandes inversores extranjeros de aquí a final de año”, afirma Ramón Morell, responsable de ETX Capital. Pero, ¿dónde pondrán el ojo y el dinero los inversores foráneos próximamente? Constructoras, telecos, bancos y energéticas son los sectores que cuentan con más papeletas para recibir capital extranjero.
CONSTRUCTORAS
Al más puro estilo “Bienvenido Mr. Marshall” la bolsa española recibe este año a los inversores extranjeros. Se calcula que en este ejercicio, sólo de inversores estadounidenses, han entrado en nuestro país unos 65.000 millones de euros, lo que, según Damián Querol, director de análisis de Banco Gallego, “puede apoyar la tendencia alcista de nuestra bolsa a final de año”. Entre estas inversiones, probablemente, la última y más llamativa entrada de capital foráneo ha sido la compra del 6% de FCC por parte de Bill Gates. El creador de Microsoft desembolsó 113 millones de euros para ocupar un sillón a la diestra de Esther Koplowitz en la segunda compañía más endeudadas del Ibex. La constructora actualmente tiene 6.184 millones de deuda neta y un apalancamiento del 7,3x, pero parece que su Plan Estratégico para reducir su endeudamiento financiero neto hasta 5.200 millones de euros ha convencido al estadounidense. Para ello, el Grupo FCC se centrará en los negocios y geografías más rentables, con ajustes de capacidad y reducción de costes para adaptarlos a las condiciones del mercado actual, junto con la desinversión de activos no estratégicos por un valor de 2.200 millones de euros.
Otra constructora a la que no le vendría nada mal la entrada de liquidez vía inversiones directos es a Sacyr. Su endeudamiento está por encima del de FCC (16,3x), pero si su plan de desapalancamiento convence –como le ha sucedido a Gates con el de FCC- probablemente comience a recibir más inversores de fuera. De hecho, ya hemos visto movimientos así este año en la compañía: por un lado, en el mes de marzo la sociedad de inversión londinense Taube Hodson Stonex Partners se hizo con el 5,9% de la constructora y, en junio, el fondo Blackrock entró comprando un 3,1% de Sacyr por unos 27 millones de euros.
Pero no sólo en el capital de las constructoras cotizadas están invirtiendo grandes fortunas extranjeras, también directamente en activos inmobiliarios. De hecho, uno de los mayores flujos de inversión extranjeros proviene de los fondos buitre que compran capital inmobiliario (créditos fallidos, gestión de inmuebles, promociones de viviendas sin vender) a bajo precio. Ejemplos de esta compra con rebaja –lo que muestra que los vendedores españoles ya se han resignado a perder dinero- son la adquisición de oficinas de Bankia por 90 millones por parte de Cerberus o de edificios públicos de la Generalitat Catalana por parte de AXA por 172 millones.
AXA, Blackstone, IG, Varde, Goldman Sachs o Anchoge están entre los mayores inversores extranjeros en el sector inmobiliario español desde junio:
TRANSACCIONES INMOBILIARIAS DESDE VERANO 2013:
Fuente: Arcano
Además, también ha aumentado la financiación extranjera no bancaria a las empresas españolas:
FINANCIACIÓN NO BANCARIA 2013:
Fuente: Arcano
TELECOS
Otro sector a punto de caramelo para los inversores extranjeros es el de las telecos. A lo largo de este año escuchamos hablar del supuesto interés magnánimo de la estadounidense AT&T por hacerse con Telefónica, rumores que fueron desmentidos por la compañía de César Alierta.
Ahora, el foco de compra se mueve hacia Jazztel y ONO. Se dice que la inglesa Vodafone podría hacerse con alguna de estas compañías para ganar peso en el mercado ibérico y, para ello, cuenta con una amplia caja de 23.000 millones proveniente básicamente de la venta de su participación en Verizon. Lo cierto es que la acción de Jazztel ha subido con consistencia este año al calor de estos rumores y, es que, es esperable que la compañía sea finalmente comida por un inversor mayor. Así pues, cuando su presidente, Leopoldo Fernández Pujals, tomó cargo, dejó claro que una de sus metas era vender la compañía. Según Carlos Ladero “Jazztel es interesante por su red de cable y sobre todo su base de clientes. Podría ser interesante para cualquier teleco que quiera posicionarse en España y lo veo factible porque está demostrando que puede ser rentable a medio plazo, mientras que a largo no me parece un negocio donde invertir”. Da la impresión de que Pujals prepara la mesa para recibir un comprador y, de hecho, descarta repartir dividendo en los próximos cinco años para invertir los flujos de capital extra en actividades que supongan un retorno del 20%, lo que, para muchos expertos viene a hacer más golosa la compañía para posibles postores. (Ver: Telecos: el resurgir de los movimientos corporativos ¿y las oportunidades de inversión?)
El otro nombre que suena, incluso con más fuerza para Vodafone, es ONO. Esta compañía le abriría las puertas al negocio de la fibra óptica a través de infraestructuras propias en varias ciudades españolas. Según un informe de Nomura, ONO valdría unos 6.100 millones. Los expertos no descartan que próximamente Vodafone anuncie la compra de una de estas compañías en nuestro mercado.
BANCOS
El sector bancario, que antes tanto miedo daba dentro y fuera de nuestras fronteras, ha pasado a ser objeto de culto. De hecho, otra muestra manifiesta del interés inversor extranjero en nuestro país fue la adquisición de EVO Banco (filial de NGC Banco) por el fondo norteamericano Apollo por 100 millones de euros más una inyección de 250 millones a partir del próximo año. El mismo día que EVO anunciaba su “adopción”, el banquero colombiano Jaime Gilinski se comprometía a comprar un 5% de la ampliación de Banco Sabadell por 275 millones, y el fondo Fintech, propiedad del magnate mexicano David Martínez, aportó otros 150 millones. Desde Vontobel AM señalan que la entrada de inversores en las financieras españolas responde a “que los bancos estaban muy castigados y se está comenzando a redescubrir su valor relativo gracias a la mejora de sus resultados”.
ENERGÉTICAS
A lo largo de los años hemos visto entradas de capital extranjero en energéticas españolas (Enel en Endesa, EDP en Gas Natural…) y ahora los expertos creen que será otra compañía foránea la que se hará con una parte importante del pastel de Gas Natural que Repsol y La Caixa tienen a la venta. La petrolera posee un 30% de la gasista y La Caixa –que aún no ha dado orden de venta- tiene un 35,27%. Así pues, las ofertas de compra de la participación de Repsol no escasean y todas vienen del exterior: EDP, GDF, Sinopec, Sonatrach, Temasek, ya han mostrado su interés. A su vez, estos inversores tienen intereses cruzados en varias energéticas españolas:
Sonatrach: ya posee un 4% de Gas Natural.
GDF Suez: llegó a poseer un 11% de Gas Natural, del que se fue desprendiendo poco a poco hasta vender el último 5% en septiembre de 2010.
Sinopec: no sería la primera vez que Repsol y Sinopec negocian, pues ya estuvieron en conversaciones para adquirir el 57% de YPF en manos de la española. Además, desde 2010 Repsol y Sinopec forman alianza en Brasil en la que es una de las mayores energéticas privadas de Latinoamérica, valorada en 17.800 millones de dólares.
Temasek: este fondo soberano de Singapur posee un 6,32% de Repsol
(Ver: Lío de faldas en el sector energético europeo)