Fiat Chrysler está en el punto de mira de las autoridades después de que ayer la agencia encargada de la protección del medio ambiente (EPA) en EEUU acusara al grupo automovilístico presidido por Sergio Marchionne de haber desarrollado un sistema informático que permite engañar los controles a las emisiones. El dispositivo podría haber sido instalado en hasta 104.000 vehículos de gran cilindrada equipados con motores diésel. De confirmarse el fraude, la compañía podría tener que hacer frente a una sanción de 4.630 millones de dólares (44.540 dólares por vehículo).
Ante estas acusaciones, los inversores ayer huyeron despavoridos del valor que tuvo que ser suspendido de cotización cuando se desplomaba más de un 16%. Sin embargo, hoy rebota con fuerza en el parqué italiano. En concreto, a estas horas el Fiat Chrysler sube un 5,80% hasta los 9,29 euros. Este avance le posibilita salvar el soporte de los 8,50 euros marcado por el retroceso de Fibonacci del 38,2%, al cual fue arrojado ayer por los inversores. Así, la acción sigue canalizando su recuperación e intenta un nuevo acercamiento al doble dígito, que miércoles había reconquistado después de un año por debajo. Ahora FC tiene la titánica meta de cerrar el enorme hueco dejado a finales de 2015 entre los 13 y los 9 euros.