"El presidente de la CNMC, José María Marín Quemada, ha remitido una carta al director general de Competencia de la Unión Europea, Alexander Italianer, solicitando nuevamente el reenvío en segunda fase de esta operación para que se analice desde España", han explicado.
Las fuentes han indicado que cuando Bruselas decide abrir la segunda fase en el estudio de la operación, el organismo regulador español tiene la posibilidad de solicitar de nuevo el reenvío a España, de acuerdo con el artículo 9 del reglamento europeo, que hace referencia a la remisión a las autoridades competentes de los Estados miembros.
La Comisión Europea anunció el pasado 4 de diciembre su intención de abrir una investigación en profundidad sobre el proyecto de compra de Jazztel por parte de Orange por considerar que la operación podría generar problemas de competencia y dar lugar a aumentos de precios para los clientes en España. La apertura de una investigación en profundidad no prejuzga el resultado de la misma.
El Ejecutivo comunitario tiene hasta el 24 de abril de 2015 para decidir si autoriza la operación, con o sin condiciones, o si la veta. Además, el regulador podría en este tiempo remitir el análisis a España. No obstante, en contadas ocasiones un estudio en segunda fase desde Bruselas se ha transferido a un Estado miembro.
El mapa de la competencia
La fuentes de la CNMC han alegado "coherencia" en esta solicitud, ya que ya se hizo la petición en primera fase, y las razones que motivaron aquella demanda se mantienen actualmente.
En concreto, si bien por lo volumen de negocio esta operación tiene dimensión comunitaria, las causas que motivan esta petición son, por una parte, la reducción de competidores, ya que de culminar esta operación, el sector de las telecomunicaciones en España pasaría a estar controlado por tres compañías de telecomunicaciones, toda vez que Vodafone se hizo recientemente con el operador de cable Ono, en lugar de las cuatro compañías con peso de mercado a nivel nacional que operan actualmente en el sector.
Del mismo modo, las fuentes señalan que el regulador español es el encargado de definir la regulación del mercado mayorista de banda ancha (antiguos mercados 4 y 5), donde la compra de Orange por parte de Jazztel es relevante ya que contribuye a modificar el panorama competitivo en este sector.
En este sentido, el organismo ha propuesto obligar a Telefónica a abrir su red de fibra a sus rivales, con unos precios fijados con un test de replicabilidad económica, excepto en nueve municipios, entre ellos Madrid y Barcelona, que representan el 16% de la población y en donde al menos hay tres operadores con despliegues simultáneos en redes de nueva generación ultrarrápida (ya sea fibra o cable).
De acuerdo con los datos de la CNMC del segundo trimestre de 2014, Telefónica mantiene una cuota en el mercado minorista de banda ancha en España del 46,1%, seguido de Vodafone (incluyendo Ono), con un 21,3%, de Orange, con un 14,7%, y de Jazztel, con un 11,9%.