Otra vez a vueltas con los 11 euros de Telefónica. La operadora se juega este soporte psicológico –más que técnico- este miércoles rojo, en el que se ha convertido en el valor más penalizado del selectivo. Técnicamente,
Antonio Espín, analista independiente, indica que “en estos niveles está cómoda tras caer bastante, lo que es negativo. Tiene una resistencia en 11,50 y un soporte en 10,85. Tiene un atractivo nulo. Quien esté dentro, puede mantenerlo con stop en 10,70”.
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Este miércoles a Telefónica le están pesando los consejos de los brokers. Así pues, BoAf ha rebajado su recomendación sobre el valor a infraponderar y también ha recortado el precio objetivo de 10,90 euros a 9,40. Además, Citi se ha mostrado neutral en cuanto a invertir en la operadora española.
En los últimos días Telefónica nos ha dado varios titulares. Por ejemplo, esta misma semana la compañía volvió a captar capital en el mercado de deuda, con una emisión de bonos que no tienen un vencimiento prefijado y que Telefónica puede diferir el pago de los intereses a su deseo. La compañía vendió entre inversores cualificados 1.750 millones de euros. Una parte de los bonos cuenta con una ventana de liquidación pasados 6 años, mientras que en el resto hay que esperar 10 años. La ventaja de este tipo de emisiones es que computan buena parte como capital, lo que no engorda el endeudamiento de la compañía, ahora que precisamente la reducción de su agujero es vital.
Además, en las últimas horas Telefónicas ha remodelado su cúpula en México. Juan Abellán será sustituido por Carlos Morales Paulin, como nuevo consejero delegado de Telefónica México.
