¿Cuáles son los consejos para la especulación bursátil?
Operar en bolsa se puede hacer de dos maneras: invirtiendo o especulando. Las operaciones especulativas tienen un enfoque de inversión en el que el inversor pretende comprar o vender acciones, divisas u otros activos únicamente para obtener un beneficio rápido. En estos casos, el inversor se conoce como especulador. Es una actitud de inversión que mucha gente desprecia. Este tipo de inversión suele tener un riesgo de pérdida importante. El especulador se arriesga a perder la mayor parte o la totalidad de su inversión inicial, pero espera obtener un beneficio considerable. El motivo del especulador es aprovechar al máximo las fluctuaciones del mercado.
La especulación bursátil suele basarse en la expectativa de un acontecimiento futuro o en la idea de cómo podría reaccionar el mercado de inversión en su conjunto ante tales expectativas. Los inversores que participan en la especulación son habituales en los mercados en los que los precios de los valores fluctúan considerablemente. Desempeñan un papel vital en los mercados al absorber el riesgo excedente e inyectar la tan necesaria liquidez en el mercado al operar donde otros inversores no se atreven.
Consejos para la especulación bursátil
- No acudas a una agencia profesional en busca de consejo para especular, te indicarán, con buen criterio, que no lo hagas, que optes por inversiones más sosegadas y tranquilas, líquidas. Te dirán, con mucha razón, que la especulación es un territorio con riesgos por tanto un coto cerrado a profesionales.
- La especulación exige información, preparación y canales adecuados para maniobrar de forma rápida, si no los tienes, opta por inversiones más tranquilas. Si las tienes, especula, pero defina antes de invertir sus objetivos, plazos y riesgos.
- Marca un objetivo, y vende cuando es alcanzado, al especular si se exprime demasiado la naranja, normalmente se acaba por amargar el zumo, no te quedes con la cerilla encendida en la mano. Hay que contentarse con pequeñas ganancias, pequeñas pero repetidas, practique la "ducha escocesa: una breve inmersión y salida rápida". Pero ten en cuenta siempre los gastos inherentes a la compraventa, el primer dinero es para el intermediario, el segundo para hacienda y el tercero para nosotros.
- Cumple a rajatabla con los niveles stoploss , de esa manera nunca perderemos más de un 5 % en el valor. La persistencia en el error es el peor de los males del inversor, es mejor siempre "perder" "que perder más".
- Se puede especular de forma exitosa en mercados alcistas y bajistas, las ventas a crédito permiten sacar provecho cuando el mercado es bajista, para especular sólo hace falta que haya un movimiento al que sacar provecho.
- Diversifica, pero no en exceso, no hay que poner todos los huevos en la misma cesta, pero tampoco disperse excesivamente sus inversiones, porque le saldrán más caras las compras y le resultará más complicada la vigilancia de sus valores.
- Evita entrar en máximos.
- Invierte en mercados y en valores que conozca bien, y en los que puedas tener una vigilancia diaria de las cotizaciones y charts, a fin de tener orientación de precios y tendencias.
- No utilices para especular los valores que cotizan por el sistema fixing (es decir sólo los que fijan precio a las 12 y a las 16 horas) tampoco aquellos valores con poca liquidez.
- Especula con menos del 10 % de sus ahorros, con aquel dinero cuya pérdida no suponga una situación de endeudamiento, especular por necesidad es perder por obligación.
- Ten en cuenta que no contará con ningún beneficio fiscal. Al tratarse de operaciones a muy corto plazo, las plusvalías se integran en la base imponible general y se verán gravadas al tipo su tipo general. Además, las minusvalía no se computan como pérdida patrimonial si se adquieren acciones homogéneas dentro de los 2 meses anteriores o posteriores a dicha venta.