- ¿Qué es un perfil conservador en bolsa?
- ¿Por qué es importante saber el perfil de los inversores?
- La capacidad de asumir el riesgo
¿Qué es un perfil conservador en bolsa?
El perfil de un inversor se define por la relación que existe entre los riesgos que está dispuesto a asumir y los rendimientos que espera obtener. Así podríamos hablar de inversores con un perfil conservador, medio y agresivo. Si no estamos dispuestos a perder nada de nuestro dinero en circunstancia alguna, seríamos catalogados como un inversor conservador. En este caso deberíamos estar dispuestos a aceptar un rendimiento bajo, ya que, como hemos dicho, riesgo y rentabilidad están directamente relacionadas.
¿Por qué es importante saber el perfil de los inversores?
Determinar el perfil del inversor es el punto de partida para la toma de decisiones. Si conocemos nuestro perfil podremos saber si un producto nos conviene o no. Una vez que conozcamos nuestro perfil debemos ser capaces de encontrar un producto apropiado para ese perfil: debemos ser conscientes del nivel de riesgo que asumimos en cada producto que contratemos.
Un riesgo inadecuado, ya sea porque no hayamos determinado correctamente nuestro perfil, o porque conociendo nuestro perfil los productos no encajen en él, puede provocarnos más de un disgusto.
La capacidad de asumir el riesgo
El riesgo es la posibilidad de que nuestra inversión no alcance el resultado esperado, o de que incluso perdamos una parte más o menos importante de nuestro capital. Antes de invertir los ahorros hay que saber qué nivel de riesgo podemos asumir.
El nivel de riesgo que el inversor puede asumir es un aspecto esencial para definir su perfil.
La capacidad de asumir riesgo se puede analizar desde dos puntos de vista, uno objetivo (la capacidad de asumir pérdidas derivadas de la situación financiera) y otro subjetivo (la disposición psicológica a experimentales pérdidas de capital). Ambos enfoques se conjugan para determinar hasta qué punto el inversor puede afrontar la incertidumbre sobre los resultados de sus inversiones.
La relación entre la capacidad de asumir riesgo y la situación financiera es determinante. Por ejemplo, si necesita tener sus ahorros disponibles para atender un pago dentro de tres meses, el nivel de riesgo asumible será muy bajo: no puede exponerse a que la evolución de sus inversiones en el corto plazo resulte negativa y, llegado el momento, no pueda satisfacer el pago.
Por otra parte, es posible que un inversor con capacidad financiera suficiente para afrontar un riesgo medioalto, tenga un carácter más conservador y prefiera renunciar a la posibilidad de mayores rentabilidades, a cambio de la seguridad de conservar su capital.
Así las cosas, entre los tres perfiles de inversor: conservador, moderado y agresivo, el conservador es el que acepta el menor perfil de riesgo. Aunque el riesgo no lo es todo, también influye el horizonte temporal de la inversión y el objetivo de la inversión. Para ello, antes de empezar a invertir, los asesores financieros realizan un test a los clientes para saber qué es lo que quiere y lo que busca en el mercado.
Aquellos con un perfil conservador en bolsa serán los que apuesten más por los tipos de activos con menos riesgo. Esto implica una menor o nula exposición a la bolsa, debido a la volatilidad que tiene la renta variable, y una mayor exposición a la renta fija, a los fondos monetarios o a otras alternativas como el oro. Es decir, el perfil conservador busca ganar rentabilidad minimizando el riesgo. Al asumir menos riesgo, también se renuncia a la rentabilidad. De hecho, los perfiles conservadores buscan una rentabilidad que les sirva para salvar la inflación. Esto es un retorno anual que esté entre el 2% y el 3%.
En España, el perfil conservador en bolsa es el más extendido por una gran aversión al riesgo por parte de inversores y ahorradores.
