- Bonos matador
- Comparación con Otros Tipos de Bonos
- Importancia Histórica y Cambio con la Introducción del Euro
- Un producto en el olvido
Bonos matador
Los bonos matador son un tipo especial de instrumento de deuda emitido en España. Reciben este nombre distintivo debido a que se emiten bajo las condiciones particulares del mercado español, incluyendo el uso de la moneda local (antes la peseta, ahora el euro) y los tipos de interés específicos de España. Sin embargo, las entidades emisoras de estos bonos son de países fuera de España.
El nombre "matador" o "torero" se utiliza simplemente porque estos bonos son emitidos en España, adaptándose a las condiciones del mercado español. Es una denominación que destaca su origen geográfico sin modificar la naturaleza fundamental del instrumento financiero, que sigue siendo una forma de deuda.
Comparación con Otros Tipos de Bonos
Este tipo de bonos no es único; existen otros similares en diferentes mercados. Por ejemplo:
- Bonos samurai: Emitidos en yenes y con referencia al mercado japonés.
- Bonos yankee: Emitidos en dólares estadounidenses por entidades extranjeras dentro de Estados Unidos.
- Bonos bulldog: Emitidos en libras esterlinas por entidades extranjeras en el Reino Unido.
Importancia Histórica y Cambio con la Introducción del Euro
Antes de la introducción del euro, los bonos matador eran especialmente atractivos para las empresas europeas. Estas empresas compraban grandes cantidades de bonos matador denominados en pesetas, la antigua moneda española, que tenía un valor relativamente bajo en comparación con otras monedas europeas. Esto ofrecía oportunidades de inversión ventajosas debido a las diferencias en los tipos de cambio y las condiciones económicas entre países.
Con la adopción del euro y la creación de la zona euro, el atractivo de los bonos matador para las empresas de otros países de la Unión Europea disminuyó significativamente. La unificación monetaria eliminó las diferencias de tipo de cambio entre los países de la eurozona, haciendo que las condiciones de emisión y compra de bonos fueran prácticamente iguales en todos los países que comparten el euro. Por ejemplo, una empresa alemana ya no encuentra beneficios adicionales al comprar bonos matador, ya que puede obtener bonos similares en su propio país con las mismas condiciones financieras.
Los bonos matador son un ejemplo interesante de cómo los instrumentos financieros pueden adaptarse a las condiciones específicas de un país. Aunque su atractivo ha cambiado con la unificación monetaria de la eurozona, siguen siendo una parte relevante del panorama financiero español y global. La comparación con otros bonos internacionales resalta la importancia de entender cómo las condiciones locales pueden influir en las decisiones de inversión y emisión de deuda.
Un producto en el olvido
En 1987, cuando los tipos de interés en España alcanzaban el 19%, la Comunidad Económica Europea decidió fomentar la emisión de deuda de organismos internacionales en diversas monedas, incluyendo las pesetas. Los conocidos como bonos matador - aunque podrían haberse llamado bonos flamenco, se eligió un nombre relacionado con el toreo - se comercializaron en España durante los años noventa, ofreciendo cupones anuales cercanos al 10%. Hoy en día, quedan pocos ejemplos de estos bonos, con algunos venciendo entre este año y 2026.
En España, estos bonos comenzaron a emitirse en 1991 y se regularon en 1992 para abarcar todas las emisiones de obligaciones u otros valores en pesetas por parte de emisores extranjeros, diversificando así sus fuentes de financiación a pesar del riesgo de fluctuación de divisas. Del mismo modo, en Japón se emitieron los bonos samurái, en Reino Unido los bonos bulldog, y en Estados Unidos los bonos yankee.
Actualmente, tres de estas emisiones de los noventa siguen vigentes. Por ejemplo, un bono emitido en 1996 por el operador ferroviario francés SNCF se amortizó en agosto de 20221, tras haber pagado un cupón anual del 8,5%. Esta emisión mantuvo un saldo vivo de 60,1 millones de euros y su último cambio en 2016 fue a un nominal del 143,8%.
Términos asociados
Renta Fija
Valores mobiliarios y afectos que representan una parte alícuota de un préstamo a una empresa privada, entidad pública o ...
Leer más