Son clasificaciones que permiten evaluar la solvencia (capacidad de un emisor para pagar los intereses y devolver lo invertido al vencimiento) de un emisor de deuda, público o privado.
Las principales agencias estadounidenses de calificación de riesgos, Moody’s y Standard & Poor’s (S&P), utilizan sistemas muy similares a la hora de asignar los ratings de crédito a los emisores de deuda privada. En ambos casos, lo más importante es la capacidad de las compañías para hacer frente al pago de sus emisiones en el vencimiento.
La máxima calificación, que se asigna a las compañías con una capacidad "extremadamente fuerte" para cumplir con sus obligaciones financieras, es de AAA en S&P y Aaa en Moody’s. Según explica esta última, es poco probable que los cambios en su perfil de crédito puedan tener un impacto negativo en su fortaleza financiera.Las siguientes calificaciones son AA en S&P y Aa en Moody’s, que señalan a empresas con mucha capacidad para hacer frente a sus pagos. En realidad, S&P asegura que no existen muchas diferencias entre estas compañías y las de la categoría superior. Una calificación A en las dos agencias significa que, a pesar de que la situación financiera de la compañía es fuerte, es más susceptible a los cambios en la situación económica.
La siguiente categoría en los ratings es BBB para S&P y Baa para Moody’s. La capacidad financiera de estas compañías es adecuada, pero un cambio a peor en las condiciones económicas pueden debilitar su capacidad. Además, según indica Moody’s, puede que en el caso de estas compañías falten ciertos elementos para proteger el pago de su deuda.
A partir de aquí, la capacidad financiera de las compañías, de mejor a peor, es definida por S&P con los siguientes ratings: BB, B, CCC y CC. En el caso de Moody’s, las calificaciones son: Ba, B, Caa, Ca y C.
Todas estas calificaciones, excepto a de AAA o Aaa, pueden venir además acompañadas por los signos + o - en el caso de S&P o por los números 1, 2, o 3 en Moody’s, que detallan todavía más la situación financiera de una empresa. En ambos casos, estas indicaciones señalan la situación relativa de una compañía dentro de una categoría.
Las principales agencias estadounidenses de calificación de riesgos, Moody’s y Standard & Poor’s (S&P), utilizan sistemas muy similares a la hora de asignar los ratings de crédito a los emisores de deuda privada. En ambos casos, lo más importante es la capacidad de las compañías para hacer frente al pago de sus emisiones en el vencimiento.
La máxima calificación, que se asigna a las compañías con una capacidad "extremadamente fuerte" para cumplir con sus obligaciones financieras, es de AAA en S&P y Aaa en Moody’s. Según explica esta última, es poco probable que los cambios en su perfil de crédito puedan tener un impacto negativo en su fortaleza financiera.Las siguientes calificaciones son AA en S&P y Aa en Moody’s, que señalan a empresas con mucha capacidad para hacer frente a sus pagos. En realidad, S&P asegura que no existen muchas diferencias entre estas compañías y las de la categoría superior. Una calificación A en las dos agencias significa que, a pesar de que la situación financiera de la compañía es fuerte, es más susceptible a los cambios en la situación económica.
La siguiente categoría en los ratings es BBB para S&P y Baa para Moody’s. La capacidad financiera de estas compañías es adecuada, pero un cambio a peor en las condiciones económicas pueden debilitar su capacidad. Además, según indica Moody’s, puede que en el caso de estas compañías falten ciertos elementos para proteger el pago de su deuda.
A partir de aquí, la capacidad financiera de las compañías, de mejor a peor, es definida por S&P con los siguientes ratings: BB, B, CCC y CC. En el caso de Moody’s, las calificaciones son: Ba, B, Caa, Ca y C.
Todas estas calificaciones, excepto a de AAA o Aaa, pueden venir además acompañadas por los signos + o - en el caso de S&P o por los números 1, 2, o 3 en Moody’s, que detallan todavía más la situación financiera de una empresa. En ambos casos, estas indicaciones señalan la situación relativa de una compañía dentro de una categoría.