Un “zombie” es un muerto resucitado por medios mágicos por un hechicero para convertirlo en su esclavo.
En EEUU se acuñó el término “empresa zombie” durante la crisis del sector bancario en el año 2008.
Desde 2008 se utiliza la expresion "zombie" para referirse a aquellas compañías que incurren en pérdidas de forma sistemática, suelen tener problemas de solvencia, y sobreviven únicamente por las ayudas financieras externas (bancos y mercado de bonos), gracias a la politica monetaria ultraexpansiva de los bancos centrales (los hechiceros).
Unas políticas monetarias tan expansivas llevan a los bancos privados a seguir prestando dinero a estas empresas insolventes, y de ese modo no provocan una falta de liquidez que podría llevarlas a la quiebra o a la suspensión de pagos, y así los bancos no se ven obligados a provisionar con cargo a los resultados del ejercicio el riesgo que tienen contraído con ellas.
Con unos tipos de interés cerca de cero, muchas de estas sociedades además de la financiación bancaria obtienen financiación barata reurriendo al ahorro público mediante la emisión de bonos basura y, en algunos casos, con una calificación más baja que BBB-.
En el caso de las empresas europeas domina la financiación bancaria.
En la actualidad el 14% de las empresas que integran el S&P 1500 son consideradas “zombies”.
En China, aproximadamente el 20 por ciento de las compañías tipo A (empresas chinas cuyas acciones cotizan en yuanes y con acceso muy limitado de los inversores foráneos a la inversión en ellos) en las bolsas de Shanghai y Shenzhen son "zombies".
Estos niveles son impresionantemente altos (hace 30 años ese porcentaje era del 2%) y, lo que es peor, es que si los bancos centrales continúan con sus actuales políticas monetarias, corremos el riesgo de que esos porcentajes sigan aumentando, como ha sucedido en Japón.
Las sociedades “zombies” utilizan unos recursos que no van a parar a otras empresas que podrían utilizarlos de forma productiva. Por ese motivo, cuanto mayor sea el número de empresas “zombies”, mayor es el riesgo de que se produzca un repentino colapso económico y bursátil.
A pesar del elevado riesgo de "zombificaión" de la economía, nadie presta atención a este hecho a pesar de que muchos carteras y fondos de inversión están infectados con bonos basura emitidos por estas compañías.
Por ese motivo, creo que lo más adecuado es invertir única y exclusivamente en bonos del gobierno de los EEUU, a pesar de que las bolsas y la cotización de los bonos basura siga subiendo. Es cierto que existe una gran cantidad de compañías "zombies" en Japón y el banco central japonés sigue manteniendo su economía, a la bolsa y al mercado de bonos.
Es evidente que la economía global tiende a la japanización
En la sesión de hoy no ha habido novedades en el comportamiento del S&P 500, se ha limitado a moverse lateralmente dentro de un rango de precio más estrecho que el del día anterior.
El soporte significativo sigue estando en torno a 2.785. Y como he dicho en comentarios anteriores, en mi opinión, el escenario más probable es que lo perfore y se dirija a la zona de los 2.680.
Ahora bien, es preciso tener en cuenta que cuando el S&P 500 llegó a los 2.785 dibujó un “pin bar” al alza. Es pequeño pero significa que esa zona de soporte es significativa y, por el momento, el soporte ha funcionado.
Por lo tanto, nos vamos a fijar en el nivel de los 2.826. Y si fuese superado, el S&P 500 muy probablemente se dirigiría de nuevo al 2.860.
El NASDAQ 100 parece estar ligeramente más débil que el S&P 500 pero está respetando el soporte de la zona 7.240.
Sigo pensando que lo más probable es que se encamine como mínimo al 7.200, pero como está respetando ese soporte, tenemos que plantearnos la posibilidad de que funcione y dé pie a que se despliegue un tramito al alza.
Al igual que hemos hecho con el S&P 500, nos fijaremos en un nivel cuya superación nos avise de un intento de vuelta a la zona de máximos. Lo situaremos en la zona de los 7.346. En el caso de que fuese superado, probablemente el NASDAQ 100 se encaminaría hacia el 7.480.
El DAX intentó superar de nuevo el 11.500 pero no pudo y se giró a la baja.
En mi opinión, lo más probable es que despliegue otro tramo a la baja y que alcance, como mínimo, el 11.200.
En cuanto al IBEX, sigo pensando que lo más probable es que se encamine hacia el 9.100.