Damos comienzo a este análisis de las dos criptodivisas de mayor capitalización con la comparativa directa entre ambos activos. El pasado mes de marzo comentábamos que Bitcoin presenta un mejor comportamiento relativo frente al Ethereum, puesto que en la comparativa entre ambas criptodivisas, tenemos una estructura creciente favorable al Bitcoin, con un importante canal lateral de largo que el precio ha superado al alza sumado a, un canal lateral de corto plazo, con un objetivo alcista activo favorable al Bitcoin.
Gráfico 1. Diferencial entre Bitcoin (BTC) y Ethereum (ETH) en escala semanal con volatilidad (gráfico central) y MACD (gráfico inferior). Fuente: ProRealTime y elaboración propia.
En este sentido, dicho diferencial continúa cotizando en niveles muy próximos a los máximos anuales, proyectados a partir de los 20,15 puntos. De este modo, tenemos un primer objetivo alcista proyectado alrededor de los 24 puntos, fruto del canal lateral de corto plazo que se ha superado al alza recientemente. Este objetivo permanecerá activo mientras que no se perforen los 16,62 puntos.
Por otra parte, tenemos un importante objetivo de largo plazo cercano a los 33 puntos, tras superarse el canal lateral de largo plazo comprendido entre los 11,38 y los 19,05 puntos. De este modo, continuamos esperando un mejor comportamiento del Bitcoin frente al Ethereum.
A partir de la conclusión anterior, vamos a analizar la situación de cada criptodivisa de manera independiente para concretar los niveles de precios más importantes a vigilar de cara a las próximas semanas / meses.
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ANÁLISIS DE BITCOIN Y ETHEREUM
Bitcoin (BTC): Continúa oscilando alrededor del área de resistencia significativa alrededor de los máximos históricos alcanzados en 2021 en torno a los 69.000 / 59.200$. En la línea de lo comentado en el pasado informe del mes de marzo, el contexto actual no difiere mucho de lo acaecido en 2021, ya que las lecturas del oscilador MACD semanal,-ver gráfico 2- se sitúan de nuevo en un área de extrema sobrecompra y, está cerca de poder producir cortes descendentes. Además, la volatilidad continúa en niveles muy reducidos, aunque se está empezando a producir un aumento en la misma.
Gráfico 2. Bitcoin (BTC) en escala semanal con volatilidad (gráfico central superior), MACD (gráfico central inferior) y actividad de contratación (ventana inferior). Fuente: ProRealTime y elaboración propia.
Por su parte, en escala temporal diaria -ver gráfico 3- podemos obtener una situación más definida del momento actual de Bitcoin. Por una parte, el precio se encuentra lateralizado, con una clara resistencia alrededor de los 73,800$ y, un nivel de soporte relevante alrededor de los 59.200$. De este modo, hasta que una de las dos áreas sea perforada a cierre diario, no podremos saber si estamos ante una continuación de la tendencia o un cambio en la misma. Por otra parte, se han conseguido limpiar los excesos alcistas y la sobrecompra en el oscilador MACD diario,sin sacrificar la estructura creciente. Además, los niveles de volatilidad han aumentado con fuerza, por lo que los niveles de complacencia registrados a finales de febrero se han eliminado. Por tanto, por el momento, estamos asistiendo a una consolidación en tiempo en el activo bajo estudio.
Gráfico 3. Bitcoin (BTC) en escala diaria con volatilidad (gráfico central superior), MACD (gráfico central inferior) y actividad de contratación (ventana inferior). Fuente: ProRealTime y elaboración propia.
Continuamos con el análisis de Ethereum (ETH) en gráfico semanal-ver gráfico 4- y, en gráfico diario-ver gráfico 5-.
En gráfico semanal, podemos observar que la estructura de fondo en Ethereum (ETH) continúa siendo claramente creciente, realizando el precio recientemente un tercer apoyo en la directriz creciente acelerada. De este modo, mientras el precio no perfore esta directriz continuamos manteniendo una actitud constructiva en el activo. Además, tenemos un nuevo nivel de soporte horizontal alrededor de los 2.854$ y, el anterior soporte alrededor de los 3.080$ comentado en la anterior actualización continúa funcionando, ya que no se ha producido un cierre semanal por debajo de esa cota de precios.
Gráfico 4. Ethereum (ETH) en escala semanal con volatilidad (gráfico central superior), MACD (gráfico central inferior) y actividad de contratación (ventana inferior). Fuente: ProRealTime y elaboración propia.
Por su parte, en escala temporal diaria, podemos observar que el precio se acerca a una zona de posible desenlace, ya que tenemos una directriz de máximos decrecientes activa y, la directriz de mínimos crecientes comentada anteriormente. En este sentido, pronto veremos que una de las directrices será perforada. Además, el precio se encuentra sobre los niveles de Fibonacci de la estructura iniciada en los mínimos de octubre.
Por último, observamos que en el oscilador MACD se han conseguido limpiar los niveles de extrema sobrecompra y, la volatilidad ha aumentado con fuerza, por lo que ya no tenemos con niveles de complacencia en escala temporal diaria.
Gráfico 5. Ethereum (ETH) en escala diaria con volatilidad (gráfico central superior), MACD (gráfico central inferior) y actividad de contratación (ventana inferior). Fuente: ProRealTime y elaboración propia.
