¿Cómo se vive un proceso de integración en medio de una crisis sanitaria que tiene en vilo el desarrollo al alza de la economía española?
No podemos negar que vivimos un momento de incertidumbre a nivel económico y social. Debido a la pandemia, algunas unidades de negocio de nuestro grupo se han visto más afectadas que otras, no obstante, nosotros seguimos en la senda de crecimiento, gracias precisamente a la integración del área de medios del Grupo Squirrel Capital.
A día de hoy, ¿la integración de las áreas de publicidad, 'e-commerce', radio, televisión y otros servicios accesorios de Squirrel en Vértice 360 se da por completada?
Si, la integración ha sido efectiva con efecto 30 de julio de los presentes. Ahora el nuevo Vértice 360 pasa a tener cuatro patas bien diferenciadas. La primera es publicidad, con Best Option Media, donde tenemos agencias y planificación de medios, operando en unos 60 países. La segunda es medios de comunicación, donde tenemos un network propio de `pay tv’, con seis canales que distribuimos a 100 países, más licencias de cuatro canales autonómicos adquiridas a Vocento y un canal propio en Italia. La tercera es la de Contenidos, que es la anterior Vértice, pero ahora no sólo con producción y distribución en España, sino para 37 países, y la cuarta parte es la de Servicios Audiovisuales, que va desde el alquiler de una cámara a la contratación de servicio de telepuertos, de los cuales contamos con dos en Italia.
Tras la ampliación de capital de 220 millones de euros llevada a cabo para la integración del Grupo Squirrel, ¿cómo queda distribuido el accionariado de Vértice 360?
En torno al 90% pertenece a mi holding, otro 1% de accionistas institucionales y otro 1% de Giglio Group, filial italiana del sector del `ecommerce´ y el resto free float.
¿Qué le diría al accionista minoritario, que podría sentirse relegado a un segundo plano en la compañía?
Siempre he preferido tener el 1% de Inditex que el 100% de un ultramarinos. Estamos trabajando sin descanso para que Vértice 360 sea una gran realidad, y para que todos, incluidos los pequeños accionistas, ganen dinero gracias a la revalorización de la compañía.
Los resultados del primer trimestre de 2020 han supuesto un aumento del 19% en el beneficio neto. ¿Cuáles son las previsiones financieras tras esta operación de integración?
Está claro que la integración supone un aumento significativo de los fundamentales de la compañía, llevándonos a una capitalización cercana a los 300 millones de euros. Estamos ante un importante grupo internacional sin deuda y con proyección de crecimientos anuales dentro de su sector.
La diversificación en sus ingresos ha sido una de las claves en la integración de Squirrel. ¿El negocio de la distribución de largometrajes está generando inquietud?
No, al contrario, creemos firmemente en el potencial que tiene la producción y la distribución de contenidos dentro de nuestro modelo de negocio, la integración de todas las áreas –publicidad, contenidos, medios de comunicación y servicios audiovisuales- reforzará las sinergias existentes entre estas áreas para lograr así, posicionarnos como uno de los grandes players del sector. De hecho, hemos potenciado esta área de negocio adquiriendo ya los derechos para la distribución de contenidos para 37 países -los 33 latinoamericanos, más España, Portugal, Italia y Andorra-.
Que 2020 va a ser un año “raro” en las cuentas de la mayoría de las compañías es una realidad. ¿Qué impacto prevéis en vuestro negocio a causa de la crisis generada por la Covid-19?
En primer lugar, nos hemos visto obligados a actuar de forma rápida para optimizar y revisar nuestros planes de negocio para este año, intentando estabilizar los ingresos encontrando nuevas formas de crecimiento alineadas con una demanda en constante cambio.
No obstante, al tener una sólida base financiera, sin deuda, nos permite estar afrontando de una manera más controlada la reducción de ingresos causados por los efectos de la pandemia.
Por otro lado, también me gustaría reseñar que gran parte de nuestras líneas de negocio ya están en un porcentaje de crecimiento muy parecido a los que teníamos previos a la crisis sanitaria.
