El objetivo principal de la cartera 60/40 es lograr un equilibrio entre el crecimiento y la estabilidad. La asignación del 60% a acciones busca generar rendimientos a largo plazo y aprovechar el potencial de crecimiento de los mercados de valores. Por otro lado, la asignación del 40% a bonos tiene como objetivo proporcionar estabilidad y protección en momentos de volatilidad o incertidumbre en los mercados.
La cartera se ha comportado este año magníficamente bien en bolsa, ya sea con inversiones en Europa, EEUU o Japón y es que las subidas de tipos del año pasado hicieron sufrir a la renta fija, pero una vez han ido venciendo los bonos en carteras, se van incorporando las nuevas emisiones.
La razón detrás de la estrategia 60/40 radica en la naturaleza de las acciones y los bonos como clases de activos. Las acciones son consideradas de mayor riesgo pero con un potencial de rendimientos más altos a largo plazo. Por otro lado, los bonos tienden a ser menos riesgosos y ofrecen una rentabilidad más estable y predecible. Al combinar ambas clases de activos en una proporción fija, se busca aprovechar las fortalezas de cada una y mitigar los riesgos asociados.
La cartera 60/40 es especialmente popular entre los inversores que tienen un horizonte de inversión a largo plazo y buscan un enfoque conservador pero equilibrado. Esta estrategia puede ofrecer una cierta protección contra la volatilidad del mercado y reducir el impacto de las caídas en el valor de la cartera y aprovecharnos de un aumento de los precios en renta variable.
Además, la cartera 60/40 puede adaptarse a las necesidades y tolerancia al riesgo de cada inversor. Por ejemplo, algunos inversores pueden optar por una asignación 60/40 más agresiva, aumentando la proporción de acciones para buscar mayores rendimientos a costa de una mayor exposición al riesgo. Otros inversores más conservadores pueden optar por una asignación más defensiva, con una proporción mayor de bonos para minimizar el riesgo.
Es importante destacar que la cartera 60/40 no garantiza el éxito ni elimina por completo el riesgo de pérdidas. Los mercados financieros son impredecibles y están sujetos a fluctuaciones. Sin embargo, esta estrategia se basa en la diversificación y en el concepto de que diferentes clases de activos pueden comportarse de manera diferente en diferentes condiciones económicas.
En resumen, la cartera 60/40 es una estrategia de inversión equilibrada que busca combinar el crecimiento a largo plazo de las acciones con la estabilidad de los bonos. Es una opción popular para los inversores que buscan un enfoque conservador pero equilibrado y que desean mantener una exposición diversificada en sus inversiones. Como siempre, es recomendable consultar con un asesor financiero profesional para evaluar si esta estrategia es adecuada para tus objetivos y circunstancias personales.
En el programa practico de Estrategias de Inversión y Trading, vemos cómo construir fácilmente una cartera 60/40 y otras muchas formas de inversión.