No podemos esperar a que el agua caiga del cielo y riegue los brotes verdes de la economía porque el BCE, el FMI, el BoE o cualquier otro Banco Central abran el grifo. Los países, por sí solos, pueden hacer más para dar un espaldarazo a la recuperación económica, ¿cómo? Según el
informe sobre Perspectivas de la economía mundial elaborado por el FMI, se puede lograr gracias a la inversión en infraestructuras.
El organismo presidido por Christine Lagarde afirma que las infraestructuras son un insumo indispensable para la producción en una economía y tienen efectos sumamente complementarios en otros insumos, como la mano de obra y el capital privado. Además, según el FMI, éste es el momento ideal para que los países con necesidades de infraestructuras den a éstas un impulso, gracias a que:
- Los costos de endeudamiento están en niveles bajos y hay poca demanda en las economías avanzadas, y en muchas economías de mercados emergentes y en desarrollo hay limitaciones de infraestructura.
- El aumento de la inversión en infraestructura pública eleva el producto interior brutos a corto y largo plazo, sobre todo en períodos en que hay capacidad económica ociosa y cuando la eficiencia de la inversión es alta.
- Si se realiza correctamente, la inversión en infraestructura pública puede financiarse por sí sola.
El modelo de financiación de estas infraestructuras debe basarse en la inversión pública mediante la emisión de deuda y no mediante la subida de impuestos o el recorte de otros gastos.
Fuente: FMI