semana santa

La Semana Santa es uno de los periodos favoritos de los españoles, no tanto por su connotación religiosa, sino por ser las primeras vacaciones que muchos aprovechan para descansar o irse de vacaciones. Uno de los sectores más beneficiados de forma directa en esta época es el sector turístico, ya que los españoles buscan lugares y desplazamientos para disfrutar de experiencias únicas, lo que se traduce en un aumento en la demanda de hoteles y otros alojamientos turísticos así como en empresas de transporte. 

Si bien en la pandemia el sector turístico fue uno de los más perjudicados, se ha visto cómo la flexibilización de medidas y la disponibilidad para viajar ha hecho que se recupere y bata récords históricos. Según el último Barómetro Turístico de Andersen Consulting, el gasto total de los españoles alcanzará los 54.589 millones de euros en 2025, un 2,6% más que el año anterior; sin embargo, el número de desplazamientos se verá reducido un 1,3%. Estas cifras reflejan la subida de precios unida a un cambio de hábitos por parte de la población española. Se prevé que este año se realicen viajes más largos, aunque con menor frecuencia. 

En el caso de la Semana Santa según un estudio de SiteMinder, en la mayoría de los países de Europa se ha producido un aumento de la tarifa media diaria en las reservas hoteleras, situando a España en segunda posición después de Portugal, quien ha experimentado un crecimiento del 7,97% registrando un ADR de 237,23 euros. Según este mismo estudio, la mayor parte de los turistas que viajarán en Semana Santa son internacionales, un 70% con respecto al 54% del año anterior. 

El sector turístico no solamente es uno de los principales motores de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) español (actualmente es del 13%), sino también es fundamental para el crecimiento económico de empresas nacionales. 

La recuperación y transformación del sector turístico también se ven reflejadas en el comportamiento que tienen las empresas vinculadas al turismo en España. A  continuación, se presenta un análisis de AENA, IAG y Meliá, que ha permitido a estas compañías consolidar posiciones estratégicas en el mercado.

Aena

Aena ha demostrado una fuerte resiliencia empresarial que se vio reflejada en le época del COVID y que se ha visto completamente recuperada en los años posteriores a la pandemia. En 2024, la empresa de infraestructuras y transporte logró un beneficio de 1.934 millones de euros y su EBITDA alcanzó los 3.510 millones gracias a la recuperación económica y al tráfico de pasajeros.

Fruto de su gran desempeño, la compañía ha aprobado recientemente el reparto de dividendos de 9,74 euros por acción con cargo a los resultados del ejercicio de 2024, lo que se tradujo en un 27,4% más que en 2023. Aena también ha realizado un split de sus acciones en la proporción de 10 por cada acción, con el objetivo de aportar mayor liquidez y situarse en la media del selectivo español.

La gran estructura financiera y su diversificación geográfica y expansión en mercados estratégicos como Brasil o Europa, hacen que la compañía tenga perspectivas optimistas en cuanto a su crecimiento para este año. Dentro de sus objetivos, Aena planea llegar a los 320 millones de pasajeros en Estados Unidos, a pesar de la incertidumbre y volatilidad por los aranceles. La expansión de aeropuertos como el de Luton en Londres o el aeropuerto de Barcelona - El Prat en Barcelona son hitos fundamentales para su crecimiento.

El Plan Estratégico 2022-2026 prevé un crecimiento en EBITDA superior al 20% con respecto a 2023 y mantener el margen de EBITDA en torno al 59%. Los ingresos comerciales crecerán un 48% en 2026, con respecto a 2019, y el ingreso comercial por pasajero un 32%, con respecto al 12%.

En base al análisis fundamental realizado por María Mira, MFIA, Analista fundamental de Estrategias de Inversión, en una valoración por múltiplos y ratios bursátiles bajo estimación para 2025 de 13,45€/acción, el mercado ya descuenta el valor de su cuenta de resultados, si bien, el sector está en plena ebullición y las cifras de pasajeros, revisión de tarifas, etc. deberían favorecer una revisión al alza en proyecciones que moderará múltiplos. 

Bajo su estimación de resultados actuales y a cotización de este informe, el mercado paga un PER de 16,6x; descontado el crecimiento estimado para el BPA, el ratio PEG se va a niveles ajustados. EV/EBITDA supera las 10v y PCF de doble dígito. La recomendación por valoración fundamental es mantener si está en cartera y para una entrada esperar a que modere los ratios. 

Álvaro Nieto, analista técnico de Estrategias de inversión hace un breve análisis de Aena donde destaca que en el gráfico diario de la cotización de Aena (AENA), observamos que, en el rebote al que estamos asistiendo durante las últimas horas, el precio está encontrando apoyos en el mínimo de la sesión del pasado lunes día 3 de febrero en el entorno de los 204,2€ por acción.

En este sentido, es importante que el precio no produzca un cierre diario por debajo de este nivel, puesto que, si es perforado, el precio podría atacar un segundo nivel de soporte importante en los mínimos de la sesión del pasado miércoles en el área de los 198,7€ por acción. Además, la media móvil simple de 200 sesiones (línea naranja) se sitúa justo sobre el segundo nivel de soporte en el área de los 198,7€ por acción, demostrando con ello que el activo se mantiene fuerte a pesar de las caídas producidas durante las últimas sesiones.


IAG

A pesar de algunas caídas registradas en los últimos días, IAG (Iberia), que integra compañías como Iberia, British Airways y Vueling, presentó unos positivos resultados correspondientes al ejercicio 2024 en los que obtuvo un beneficio neto de 2.732 millones de euros, lo que se tradujo en un 2,9% más que en el ejercicio anterior. Sus ingresos totales crecieron un 9%, situándose en los 32.100 millones de euros. Con respecto al número de pasajeros, la compañía también experimentó un crecimiento del 5,6%, un total de 122,05 millones, registrando por primera vez las cifras previas a la pandemia.

El crecimiento de la capacidad operativa se ha materializado gracias a la modernización de sus aviones, que alcanzan 106, y además, se ha aumentado el número de asientos.
La compañía también ha aumentado su liquidez en 13.362 millones de euros, un 15% superior al año anterior y su deuda neta se redujo en un 18,69%, alcanzando los 7.517 millones de euros.

En cuanto a los dividendos, IAG retomó el pago con un importe de 0,03 euros por acción correspondientes al ejercicio de 2024 que pagó en el mes de septiembre. A partir del próximo 30 de junio, pagará otro dividendo de 0,06 euros por acción, lo que suma un total de 435 millones de euros con cargo a los resultados de 2024.

Recientemente, IAG ha manifestado que trabajará de manera conjunta con la Autoridad de los Mercados y la Competencia de Reino Unido para mejorar la competencia en rutas transatlánticas.
En su estrategia a medio plazo, IAG prevé alcanzar márgenes operativos situados entre el 12% y 15% y una rentabilidad sobre capital del 13% al 16%. Asimismo, se ha marcado el objetivo de aumentar su capacidad entre el 4% y el 5%.

En términos de inmovilizado, IAG planea recibir un total de 26 aeronaves que permitirán ampliar sus rutas en mercados estratégicos como Estados Unidos. Planea recibir 26 nuevas aeronaves en 2025, entre ellas 10 del modelo A321XLR, que permitirán ampliar rutas a EE.UU. y otros mercados clave. También tiene previsto realizar modernizaciones en su flotas de aviones y renovar las cabinas. Por mercados, prevé aumentos de frecuencias de vuelos a los Ángeles, a Boston y a Washington, entre otras en el caso de América del Norte y a Buenos Aires, Sao Paulo o Santiago de Chile en Latam. Para Europa, la compañía ha anunciado que habrá nuevas rutas para Italia, Marruecos o Salzburgo así como nuevos destinos como Esmirna.

Según Mira, en una valoración por ratios y actualizadas nuestras previsiones a BPA para el cierre de 2025 a 0,64€/acción y Cash flow positivo (CFA 1,19) el mercado descuenta un PER de 5,5x, tras la fuerte penalización a raíz de la guerra arancelaria y desde más de 16v de 2022; EV/EBITDA en 3,4x, desde más de 5x al cierre de 2022. Retoma además el pago del dividendo. IAG cotiza sin duda a niveles muy atractivos, con potencial avalado por la mejora en la cuenta de resultados, menor apalancamiento y un dinamismo en su negocio que da sostenibilidad a las previsiones.  En base a una valoración fundamental y para un horizonte de inversión de largo plazo, la recomendación es positiva para los títulos de IAG. 

Por su parte, Nieto, subraya que en el gráfico diario de IAG (IAG), observamos que, el precio ha chocado desde la apertura de la sesión de ayer con la directriz bajista iniciada en la sesión del pasado lunes día 3 de marzo, de modo que, la tendencia bajista continúa siendo dominante en el activo. No obstante, el precio vuelve a situarse por encima de la media móvil simple de 200 sesiones con el rebote al que estamos asistiendo, siendo importante que no asistamos a un cierre diario por debajo de los 2,727€.

De este modo, si se produce la perforación de los 2,727€ por acción, el precio podría volver a testear los mínimos del pasado lunes en el área de los 2,461€ por acción. 

Meliá Hotels International

Meliá Hotels continúa con su estrategia de internacionalización y expansión de hoteles así como su enfoque en el sector del lujo y su apuesta por la sostenibilidad. En 2024, la hotelera registró un beneficio neto de 162 millones de euros, un 24,5% más que en 2023. Su EBITDA en términos ajustados sin plusvalías se situó en 533,6 millones de euros vs los 486,5 millones de euros registrados en el ejercicio anterior. Las plusvalías netas de 2024 aumentaron por la revalorización de las inversiones inmobiliarias llevadas a cabo por un experto independiente y por la venta de terrenos y otros activos hoteleros enmarcados dentro de la estrategia de rotación de la compañía.

Otro factor a destacar fue la reducción de la deuda por la generación de caja y su estrategia de expansión a mercados internacionales clave. Meliá destaca por la gran capacidad de adaptarse a un sector que está en continua evolución y por su capacidad de haber hecho frente a desafíos como el COVID, lo que la convierte en una compañía con alta competitividad.
En 2024, Meliá retomó el pago de dividendos abonando 0,025 euros por acción a sus accionistas y el objetivo de la compañía es seguir manteniendo esta remuneración y recuperar los niveles de pay-out previos a la pandemia.

Meliá, ha destacado que 2024 ha sido muy positivo y considera que la normalización y el crecimiento de la demanda va a permitir a la compañía crecer considerablemente a medio y largo plazo. De hecho, Meliá afirmó que tras crecer durante tres años consecutivos con un RevPAR de doble dígito, para 2025 esperan crecer en un dígito aproximado del 5-6%.

Según María Mira, bajo una previsión de cierre de 2025 con BPA en torno a 0,65€/acción, Meliá cotiza a 10,58x beneficios, caro frente a niveles medios en los últimos ejercicios. Ajustado el PER por el crecimiento estimado para el BPA, el ratio PEG se va a niveles también ajustados. No está barata por múltiplo sobre cash Flow, ni por EV/EBITDA bajo estimación 2025. 

Mira afirma que si cumple previsiones y generan consistencia en estimaciones para 2026, los múltiplos a más largo plazo cotizarán a mejores niveles. En base a criterios de valoración fundamental, la recomendación para Meliá, para una inversión a largo plazo es mantener si está en cartera y esperar moderación de múltiplos y de deuda para entrada. 

Desde el punto de vista técnico, Álvaro Nieto, afirma que en el gráfico diario de Melia Hotels (MEL), observamos un comportamiento muy similar a lo producido en la cotización de IAG, puesto que, el precio ha chocado desde la apertura de la sesión de ayer con la directriz bajista iniciada en la sesión del pasado lunes día 3 de marzo, de modo que, ambos activos están presentando un comportamiento muy similar. 

En este sentido, es importante que no asistamos a un cierre diario por debajo de los 6,095€ por acción, ya que la perforación de este primer nivel de soporte puede abrir la puerta a nuevas caídas en la cotización, por lo que situamos el próximo nivel de soporte en el entorno de los 5,89€ por acción, pudiendo destacar también una tercera área de soporte en los mínimos de la sesión del pasado lunes y los mínimos de la sesión del pasado miércoles día 17 de enero de 2024 sobre los 5,615 y los 5,695€ por acción.