No hay pronósticos de calado – y con cierta veracidad- sobre la marcha alcista de Ethereum en la última semana. Pero cada vez son más los que colocan a un lado y a otro de la balanza los beneficios de la “La Fusión” en ciernes. En realidad, nadie pone en tela de juicio las ventajas del paso de prueba de trabajo a prueba de participación, pero sí el largo y tortuoso camino que debe realizar hasta llegar a ese cambio de Ethereum 2.0.
De momento el sesgo bajista está en el ambiente. Tras una semana claramente negativa, los expertos del mercado criptográfico consideran que el activo podría poner a prueba la resistencia a la baja de los 3.000 dólares. Un nuevo declive, que veíamos el pasado lunes, tras tocar los 3.060 dólares en la parte más baja de la sesión.
Y es que en la línea de los 3.307 dólares los bajistas aparecían esta semana hasta marcar esa cota, que, de quebrarse abriría la brecha de la “memoria del mercado” con psicología incluida y que podría llegar a caer a los 2.500 dólares en las próximas semanas con un volumen bajista predominante en el mercado.
En su gráfica de cotización vemos que Ethereum recorta un 14% en la semana, a pesar de que los avances mensuales superan el 15,7%. Las caídas semestrales se colocan por encima del 14% mientras que, en lo que va de año, los recortes rozan ya el 20% para el activo.
FXStreet pone sobre la mesa algunos datos interesantes de Ethereum y su valor en el mercado, por encima de su cotización. Afirma que la tasa de ejecución actual del activo roza los 7.000 millones, o que revela su demanda masiva y que liquida diariamente 30.500 millones en valor, quince veces por encima de lo que lo hace PayPal.
A esto se une además la fuerte caída que se ha producido en sus tarifas para cada transacción desde noviembre del pasado año, hasta un 90% con un coste medio por cada una de ellas por debajo de los 6 dólares, con 625.000 direcciones activas diario, lo que supone además un nuevo máximo en su blockchain.
En cuanto a los indicadores técnicos de Estrategias de Inversión, vemos que Ethereum ha cambiado su perspectiva desde rebote al modo consolidación actual, aunque mejora un punto hasta los 5 de los 10 totales para el activo. Destaca la tendencia bajista a largo plazo, pero alcista a medio, con momento total, lento y rápido positivo, el volumen de negocio, a medio y largo plazo que es decreciente y el rango de amplitud, la volatilidad del valor que se mueve decreciente tanto a medio como a largo plazo.
Y por último recogemos las impresiones de Jason Urban, el codirector de Galaxy Digital Trading que estima que Ethereum tardará entre dos y tres años en ponerse a la altura, e incluso superar a Bitcoin. Un “flippening” como se conoce el presunto sorpasso en el universo criptográfico, que tendrá un camino por recorrer.
Todo a cuenta, claro, de la fusión, que, junto a otras implicaciones relativas, dice a la energía, debido al elevado consumo por parte de Bitcoin, está generando mucho interés, en un mundo presente y futuro marcado por la sostenibilidad y los objetivos ESG que se ponen sobre la mesa para cualquier decisión que se tome sobre las inversiones.
También optimista sobre Ethereum se muestra Mark Cuban, el millonario dueño de los Dallas Mavericks se mostraba estos días, en declaraciones a “Fortune” muy optimista sobre la fusión de la criptomoneda por dos motivos: el primero ese paso completo a prueba de participación, incluso con la validación frente al proceso actual de las transacciones que reducirá su consumo energético en un 99%.
El segundo la deflación de la que hará gala ante la menor emisión de monedas ether, con una caída de emisiones de alrededor de un 90%, lo que, señala el inversor, le conducirá a niveles similares de tarifas para reducir el suministro de Ethereum hasta en un 5% anual. Y si la demanda aumenta en la medida en la que lo hace la oferta, el precio puede elevarse.
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