La paridad ya está aquí. Niveles no vistos desde hace dos décadas que dejan a la Eurozona en una situación realmente complicada, con su principal representante, Alemania, en situación de gran vulnerabilidad provocada por la crisis geopolítica en Ucrania.
Por otro lado, la actitud más “hawkish” o agresiva de la FED, con un USD que está funcionando como activo refugio, acelera el proceso de debilitamiento con la reciente perforación del área de soporte, ahora potencial resistencia, que identificamos en torno a los 1,0520 / 1,0340.
Par EUR/USD en escala semanal con volatilidad (ventana central superior), MACD (ventana central inferior) y volumen de contratación (ventana inferior). Fuente: ProRealTime y elaboración propia.
La pelota está en el tejado del Banco Central Europeo o BCE, cuyo mandato único es la estabilidad de precios, es decir, salvaguardar el valor del Euro, algo que no parece que estén cumpliendo siendo generosos en la expresión. En este sentido, el índice de precios al consumo de la zona euro supera el 8% año contra año, niveles no vistos en décadas, sin embargo, el BCE mantiene desde hace años una política ultra laxa o “Dovish” con los tipos de interés al 0% e, incluso, con los tipos de depósitos al -0,5%.
El BCE debe mover ficha en la reunión del próximo 21 de julio, endureciendo su política monetaria lo que permitiría al par EUR/USD bajo estudio rebotar con un primer objetivo al área citada anteriormente de los 1,0520 / 1,0340 y, como segundo escenario en el que el BCE sorprendiera con un tono más agresivo –escenario poco probable- al retroceso proporcional del 38,2% / 50% de Fibonacci, niveles en torno al 1,1 como eje central aproximadamente.
Evolución IPC de la Zona Euro comparada con la Política Monetaria del BCE. Fuente: TradingEconomics.
Por su parte, si el BCE se muestra menos contundente en sus medidas o en la posterior rueda de prensa de Lagarde, la pérdida de la paridad sería más que probable, por lo que tendríamos que