El Tesoro Público ha anunciado la emisión de un nuevo bono sindicado a 10 años, que ha generado una demanda excepcional de 125.000 millones de euros, la segunda más alta registrada hasta la fecha, solo superada por el récord alcanzado a principios de este año.
Según fuentes del Ministerio de Economía, la elevada demanda ha permitido reducir en 2 puntos básicos el diferencial inicialmente anunciado, situándose en 6 puntos básicos sobre la rentabilidad del benchmark actual a 10 años. Esto se traduce en un significativo ahorro financiero para el Tesoro.
Desde el Ministerio se destaca que la gran demanda, así como el elevado número de inversores de alta calidad, reflejan la profunda accesibilidad del Tesoro a los mercados financieros. Esto se produce en un contexto de retirada gradual del Banco Central Europeo y demuestra la confianza de los inversores en la economía española.
El Tesoro ha presentado su estrategia de financiación para 2024, que contempla unas necesidades de financiación nueva de alrededor de 55.000 millones de euros para este ejercicio, lo que representa una reducción de 10.000 millones en comparación con 2023.
La emisión bruta prevista para 2024 alcanzará los 257.572 millones de euros, un 2% más alta que en 2023, debido al aumento de las amortizaciones. El grueso de estas necesidades se cubrirá a través de la emisión de instrumentos a medio y largo plazo, con el objetivo de mantener la vida media de la cartera de deuda pública.