El precio de la onza de oro troy, considerado un activo refugio por excelencia, experimentó un aumento del 1,1% ayer martes, llegando a un nuevo récord de 2.657 dólares. Este incremento se enmarca en un contexto marcado por la tendencia alcista que comenzó la semana pasada tras el recorte de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
Según datos del mercado consultados por Europa Press, el oro ha estado rompiendo récords históricos en las últimas semanas, anticipándose al movimiento de la Fed de reducir los tipos de interés. Este impulso se vio reforzado por las tensiones entre Israel y el Líbano, que también contribuyeron al alza del precio del metal precioso.
Desde la reunión de la Fed de la semana pasada, el oro ha experimentado un aumento del 4%, equivalente a 100 dólares, mientras que en lo que va del año ha acumulado una revalorización del 29%. Esta tendencia alcista se enmarca en un ciclo de flexibilización monetaria, donde tanto el Banco Central Europeo como la Fed han reducido los tipos de interés, situándolos en un rango del 4,75 al 5%.
Sergio Ávila, analista de mercados de IG, explicó que los precios históricos del oro se deben a la debilidad del dólar, la disminución de los rendimientos de los bonos y la expectativa de recortes por parte de la Fed. En un informe, Ávila señaló que el contexto económico global, con señales de debilidad en las principales economías y la posibilidad de una relajación monetaria, ha consolidado al oro como una opción de refugio para los inversores.
Bank of America (BofA) predijo a finales de junio que el precio de la onza de oro troy podría llegar a los 3.000 dólares en un plazo de 12 a 18 meses, debido a varios factores, incluida la demanda de oro por parte de los bancos centrales.
Contexto del oro: un aumento del 43% desde octubre de 2023
El precio del oro ha experimentado un fuerte repunte desde el conflicto palestino-israelí en octubre de 2023, acumulando un aumento del 45%. Impulsado por los riesgos geopolíticos y la compra masiva de oro por parte de los bancos centrales, el metal alcanzó un máximo histórico por encima de los 2.100 dólares a principios de diciembre y continuó su ascenso hasta los 2.450 dólares en mayo.
Antes de este repunte en otoño, la última vez que el oro superó los 2.000 dólares fue en mayo de 2023, debido a tensiones en el conflicto ucraniano y crisis en la banca regional estadounidense. El máximo anterior al de 2023 se registró en marzo de 2022, cuando la onza alcanzó los 2.075 dólares antes de la invasión rusa de Ucrania, y también rondó esos niveles en agosto de 2020 tras el inicio de la pandemia.
En resumen, el oro ha alcanzado un nuevo máximo histórico gracias a la combinación de factores como la política de la Fed, tensiones geopolíticas y la demanda de los bancos centrales, consolidándose como un activo refugio en un contexto de incertidumbre económica global.