La geopolítica comienza a ocupar todos los medios y empieza a servir como justificación para todos los movimientos en los mercados. El tema es preocupante y acelera la dinámica de fuerte inflación a la que hemos asistido en los últimos meses y que confirman recientemente las encuestas empresariales y a consumidores (ver “La inflación impide la recuperación. El rebote empresarial no se afianzará sin consumo”).
H-C-H en Euro Stoxx 50 en gráfico diario con Rango de amplitud en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Un ejemplo de la delicada situación actual es que, pese al fuerte repunte en el riesgo geopolítico, los bonos no están actuando de refugio (ver “Cartera de Fondos de Inversión: Posible retirada desordenada”). En cualquier otro momento, una corrección tan abultada de las bolsas y que está activando formaciones de H-C-H (el Hombro-Cabeza-Hombro es una formación chartista o gráfica de cambio de tendencia o giro a la baja) habría provocado una fuerte entrada de dinero en la renta fija.
ETF inverso sobre Bund 2x de Lyxor con Rango de amplitud en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
El mal comportamiento de las dos grandes categorías de activos desde que comenzó el año hace difícil que las carteras de los inversores presenten rentabilidades positivas. Solo aquellos que se anticiparon y apostaron decididamente por un repunte en la inflación habrán conseguido obtener un beneficio de la situación actual. En Perspectivas 2022 nosotros planteamos algunas opciones que, a día de hoy, han evolucionado sorprendentemente de forma positiva. La compra de ETFs inversos sobre bonos, la compra de volatilidad, la compra de “hard assets” o activos físicos, materias primas, la diversificación por estilos y mantener exposición a USD son algunas de las opciones planteadas y que han evolucionado de forma favorable.
ETF sobre metales industriales de WisdomTree en gráfico diario expuesto en nuestro último webinario sobre sector Minería, metales y transformación
Después de la auto palmadita en la espalda toca, como siempre, mirar hacia delante y dar respuestas. Es decir, ¿va a continuar la reciente dinámica en los mercados (todo lo que sea protección frente a inflación al alza y el resto a la baja)? Pensamos que sí.
Las condiciones que nos llevaron a adoptar la postura no han cambiado, de hecho, se han acentuado. No se aprecia el techo en inflación (los componentes de precios pagados y recibidos de las empresas se mantienen en máximos de décadas al igual que la inflación esperada por unos consumidores / familias en las que no deja de gotear su propensión al consumo) y los bancos centrales no paran de tensionar con sus intervenciones verbales. En este contexto, las actuales valoraciones de bonos y bolsa, pese a las caídas, están lejos de poder calificarse de oportunidad. Las alternativas existen y venimos tiempo ofreciéndoselas en la zona premium.