Los expertos de Bull4All Advisors recuerdan que, de media, un autónomo percibe 400 euros menos de pensión de jubilación que la que recibiría un trabajador por cuenta ajena. Obviamente, el origen de esta gran brecha de jubilación se debe a la tributación: los autónomos, por norma general, prefieren pagar menos impuestos durante su vida laboral y la traducción final se produce en el momento de jubilarse.
En este sentido, Carlos de la Parra, analista de la Eafi, apuesta por contratar fondos de inversión de renta variable a largo plazo para garantizar una 'pensión digna'. El trabajador autónomo que decida efectivamente seguir este ejemplo debe tener en cuenta tres aspectos importantes:
1. ¿Qué es la capitalización Compuesta y cómo puedo beneficiarme?
La capitalización compuesta consiste en reinvertir los beneficios, o los intereses conseguidos en una inversión lo cual nos permite multiplicar la inversión inicial con rentabilidades propias de los mercados financieros, durante largos periodos de tiempo.
2. ¿Qué beneficios fiscales tiene un fondo de inversión?
Las plusvalías obtenidas en un fondo de inversión no se tributan salvo en caso de reembolso, incluso aunque se cambien de un fondo a otro, ese ahorro nos permite acumular más beneficios que reinvertir.
3. ¿Qué rentabilidad hay que lograr para multiplicar el dinero?
Hay distintas maneras, posiciones de 100% renta variable en largos periodos del tiempo consiguen rentabilidades excepcionales. Lo importante es tener claro cuál es nuestro horizonte temporal, y que el dinero que se vaya a invertir no sea necesario en el futuro cercano.
Algunos ejemplos de ello son:
- Con una inversión inicial de 18.000 euros y una rentabilidad anualizada del 10%, tenemos que a los 42 años el valor total sería de 1.000.000 de euros.
El plazo de 42 años es para autónomos de 25 años que reserven ese dinero para la jubilación a los 67.
Respecto de la rentabilidad del 10%, hay que explicar que tiene que ser la rentabilidad año a año, pudiendo ser inferior algunos años, dado que se compensaría con otros. Si puede parecer una rentabilidad demasiado alta, solo decir que hay fondos de Inversión como Bestinver que han conseguido un 16% durante los últimos 25 años, o Sicavs como Lierde que han conseguido un 17,1% los últimos 20 años.
- En caso de no disponer de una cantidad inicial, también pueden lograrse los objetivos a través de aportaciones mensuales, sin ser necesario que se haga durante toda la vida laboral.
Por ejemplo: para el mismo plazo (42 años), la misma rentabilidad anualizada (10%, que es menor de la conseguida por muchos fondos de inversión) y el mismo objetivo (1.000.000 de euros) tenemos dos opciones. La primera sería realizar aportaciones durante toda la vida laboral, en este caso, la aportación debería ser de 133 euros. Es decir, estar aportando 133 euros durante 42 años.
La alternativa sería aportar 215 euros durante sólo los 10 primeros años y los resultados serían similares: un millón de euros al llegar a la edad de jubilación.
En conclusión, en los tiempos en los que estamos(rentabilidad de los depósitos en mínimos históricos, alta tasa de paro, y estados como el Español endeudados por casi el 100% del PIB) se impone cada vez más la necesidad de una planificación financiera eficiente a largo plazo, algo en lo que puede ayudar un asesor financiero adecuado.El plazo de 42 años es para autónomos de 25 años que reserven ese dinero para la jubilación a los 67.
Respecto de la rentabilidad del 10%, hay que explicar que tiene que ser la rentabilidad año a año, pudiendo ser inferior algunos años, dado que se compensaría con otros. Si puede parecer una rentabilidad demasiado alta, solo decir que hay fondos de Inversión como Bestinver que han conseguido un 16% durante los últimos 25 años, o Sicavs como Lierde que han conseguido un 17,1% los últimos 20 años.
- En caso de no disponer de una cantidad inicial, también pueden lograrse los objetivos a través de aportaciones mensuales, sin ser necesario que se haga durante toda la vida laboral.
Por ejemplo: para el mismo plazo (42 años), la misma rentabilidad anualizada (10%, que es menor de la conseguida por muchos fondos de inversión) y el mismo objetivo (1.000.000 de euros) tenemos dos opciones. La primera sería realizar aportaciones durante toda la vida laboral, en este caso, la aportación debería ser de 133 euros. Es decir, estar aportando 133 euros durante 42 años.
La alternativa sería aportar 215 euros durante sólo los 10 primeros años y los resultados serían similares: un millón de euros al llegar a la edad de jubilación.