Así pues, Acciona
registró plusvalías de 721 millones de euros por esta operación cerrada en abril de 2016. Sin embargo, esta cantidad extraordinaria se vio prácticamente afectada por el impacto negativo de 626 millones de euros que reflejan las cuentas de la compañía, principalmente por costes financieros que están relacionados con la refinanciación de activos de energía procedentes de Endesa. El resto del impacto tiene relación directa con provisiones por una obra que fue paralizada en Brasil y por deterioros de activos inmobiliarios.
Entretanto, la venta de la filial de fabricación de turbinas se reflejó asimismo en los ingresos con una caída del 8,7%, hasta los 5.977 millones, mientras que no tuvo efecto alguno en el beneficio bruto de explotación (Ebitda), que progresó un 1,56%, hasta 1.192 millones de euros.
Durante el pasado año, Acciona "reactivó" su actividad inversora, con un importe de 916 millones de euros, empleado fundamentalmente en reformar su posición en la firma de gestión de agua catalana ATLL y en activos de renovables. A pesar de ello, la deuda del grupo de construcción, servicios y energías limpias al cierre de 2016 se situaba en 5.131 millones de euros, importe similar a un año antes.
Desgranando los resultados por diferentes áreas de negocio, la de energía verde aportó el 62% del Ebitda y el 30% de los ingresos, si bien esta partida cae un 33,9%, hasta 1.796 millones, por el referido efecto de la venta de la filial de aerogeneradores y los bajos precios de la electricidad durante el pasado año.
Acciona puso en marcha nuevas instalaciones por 294 megavatios (MW) de potencia el pasado año, con lo que al cierre del ejercicio contaba con una cartera de instalaciones de generación de energía verde de 8.913 MW, de los que casi 3000 MW están en el exterior.
