La visión macro que es la misma que la que” llevo manteniendo hace unos años porque la macro cambia despacio y como estamos en una crisis de deuda a la japonesa, y es necesario hacer un ajuste fiscal, las previsiones de crecimiento para países desarrollados que se han endeudado mucho (Estados Unidos, Inglaterra, España, Grecia, Portugal, Bélgica o Italia) es de un crecimiento bajo o cercano a cero de media en los próximos cinco -diez años”, reconoce Juan Manuel Mazo, gestor del fondo Maral Macro de Abante Asesores..La parte privada de la economía se va a desapalancar y la parte pública tiene que hacer un enorme esfuerzo de desendeudamiento,” que al final es menor gasto y menor crecimiento económico”.
Estamos en una situación muy parecida a Japón” pero con desventajas porque la economía nipona gracias a su superávit corriente no ha necesitado de fondos extranjeros para financiar su deuda, tanto pública como privada, que está cerca del 500%”. Y otra característica de los países que tenemos este problema - endeudamiento muy importante con tipos de interés bajos y deuda pública+privada alta- es que “el arranque de partida es mucho peor y todos tenemos déficit corriente por lo que no podemos financiar con recursos propios la deuda”. Necesitamos de fondos exteriores.
Pero ¿cómo evolucionarán los tipos de interés? Mazo asegura que acabaremos con tipos cercanos a cero “pero es cierto que l mandado del BCE se refiere exclusivamente a la inflación y sorprendentemente los datos de inflación que están saliendo en los últimos meses son mucho más altos de lo esperado para el momento del ciclo en el que nos encontramos. Para el nivel de poca actividad económica que tenemos, hay una inflación muy alta”.
Aprovechar caída de las bolsas y fortaleza del dólar
En este escenario, el fondo que gestiona – Maral Macro- logra una rentabilidad positiva (3.5%) en sus cuatro primeros meses de funcionamiento. El objetivo es preservar el capital “con lo que todas las acciones van encaminadas a obtener rentabilidad positiva en cualquier entorno del mercado”. Eso sí, aunque el motor de las ideas es el análisis macro, Mazo reconoce haber utilizado “otras herramientas que nos avisaban de una debilidad de la subida hasta finales de junio principios de julio, por lo que hemos aprovechado tanto las bajadas de las bolsas como la fortaleza del dólar en este período para obtener una rentabilidad positiva.”
El estilo de gestión es muy dinámico. Podemos tener exposición cero a 100 en cualquiera de los activos, siempre ajustados al riesgo. El objetivo de rentabilidad anual está entre el 7-10% - algo en lo que vamos holgados para cumplirlo porque en sólo cuatro meses llevamos el 3.5%- pero con un objetivo de volatilidad de entre el 4-7%. Podemos tener en el fondo aquellas posiciones que no superen ese nivel de riesgo. La exposición en función de las previsiones y el entorno de inversión “podemos ajustarla teniendo en cuenta siempre la preservación del capital”.
Pero ¿a quién va dirigido el fondo? Mazo reconoce que a todos los inversores. De hecho "tenemos inversores que quieren tener parte del patrimonio invertido en un vehículo más tranquilo, también tenemos al institucional al que le aporta rentabilidad positiva e ideas para gestionar parte de la cartera".