Aunque no está claro qué rectificaciones hay que hacer en el caso de Didi, las empresas tecnológicas tendrán que prestar más atención a estas cuestiones y Pekín está especialmente preocupado por la información sensible relacionada con el gobierno.
También hemos visto una tendencia a que el riesgo de regulación salga a la superficie con más frecuencia, no sólo en la tecnología sino en otros sectores como la educación y la sanidad en China. La regulación también puede llegar mucho más rápido de lo que vemos en los mercados desarrollados y sin un largo proceso de consulta.
Los inversores deben tener esto en cuenta tanto en lo que respecta a las empresas en las que invierten como a la hora de dimensionar las posiciones, ya que, en algunos casos, como el de la educación en China, la regulación prevista parece ser mucho más dura de lo esperado.
Dicho esto, con respecto al sector chino de Internet específicamente, la intención detrás de la regulación antimonopolio es sólida.
Las multas aplicadas han sido bastante razonables, al igual que las medidas de rectificación que actores como Baba y Meituan han tenido que poner en marcha para reducir prácticas anticompetitivas como la exclusividad comercial.
¿Qué significa esto para las empresas chinas que salen a bolsa en Estados Unidos? ¿Sería prudente que los inversores evitaran cotizar allí?
Esto también envía una clara señal de que Pekín no quiere que las OPV (Oferta Pública de Venta) chinas coticen en EE.UU..
Por lo tanto, Vontobel AM cree que todas las salidas a bolsa que estaban planeando dirigirse a EE.UU. tendrán que reconsiderar su estrategia y centrarse en una salida a bolsa primaria en Hong Kong. Todo esto forma parte de la estrategia de "vuelta a casa".