El euro está débil, pero relativamente. Recordemos que el año pasado lo veíamos por debajo de la paridad. Si cogemos perspectiva de largo plazo esa debilidad sí que está teniendo su efecto.
Hay varios motivos para ello: el primero es que toda esta subida de tipos ya está descontada, el segundo porque aunque es verdad que ahora está siendo más agresivo el BCE que la Fed ésta lo ha sido ya en los últimos años, y también porque el dólar es un activo refugio en sí mismo, con lo cual hay mucho inversores que compran dólares como pueden comprar oro como reserva. En definitiva, no creo que el euro esté tan débil como en otros momentos.
A nivel técnico, el mercado de divisas es el más difícil de predecir porque depende de muchos factores y funciona 24 horas. Es un mercado que incita mucho a operar en el muy corto plazo.
En el gráfico, el euro está cotizando entre 1,10 y 1,06 euros; pero ni siquiera se puede hablar apenas de canal. Pero en el corto plazo hay más movimiento. Parece que en la semana hay un intento de caídas en el caso del euro, que te puede dar luego oportunidades largas en momentos determinados (en período de 1 ó 2 horas).
El escenario de fondos de las divisas suele ser muy distinto en el corto que el medio plazo.
