¿Qué balance hacéis de estos resultados en los que, como decía, habéis reducido pérdidas? ¿Entraba dentro de lo que esperabais para el trimestre?
Enric Rello: Lo valoramos positivamente. Nos encontramos en momentos de gran incertidumbre por la guerra de Ucrania y Rusia y los mercados están convulsos, no están en un momento positivo, más bien negativo, con lo cual, reducir pérdidas y tener menos costes estructurales es algo que reduce la incertidumbre que puede surgir alrededor de la compañía. Por todo ello, lo valoramos de una forma positiva.
¿Cuál es la posición financiera actual de Oryzon y cómo esperan que evolucione?
Enric Rello: La posición financiera de Oryzon a cierre del tercer trimestre ha sido de 27,8 millones de caja. No es una posición muy distinta a la que vamos manteniendo históricamente, el comportamiento de la posición financiera es algo así como una cordillera de montañas, en un momento estamos en uno de los picos, luego vamos a unas zonas valle para luego volver a reactivar el impulso… Y se está comportando de la misma manera que se ha comportado históricamente, no le daría una especial relevancia ni aunque el importe sea positivo, si bien es cierto, esos 27,8 millones de caja disponibles te permiten afrontar los próximos meses con cierta tranquilidad. Esto estaría dentro de la política planificada por la compañía.
Además, destaca la fuerte inversión en I+D. ¿Qué cifras marcan esta partida? ¿Seguirán manteniendo este ritmo en los próximos meses y de cara al nuevo ejercicio?
Carlos Buesa: La inversión va ligada a nuestros ensayos clínicos y en este tercer trimestre hemos llegado a un punto máximo de cifra récord de 12,2 millones de euros en el mes de septiembre.
No obstante, la inversión también va a ir focalizada en los próximos meses en los ensayos clínicos. Los que más consumo de recursos nos van a llevar van a ser el ensayo clínico PORTICO y FRIDA.
Iremos viendo cierta reducción en el próximo trimestre y durante el 2023 por la propia idiosincrasia de los ensayos clínicos porque igual que hemos tenido un punto especialmente alto, probablemente el consumo de caja sea algo menor para este último trimestre y especialmente en el 2023.
¿Cómo ha evolucionado el negocio de la compañía en estos nueve meses del año? Y ¿Cómo están evolucionando los proyectos que tiene en marcha Oryzon?
Carlos Buesa: La compañía sigue evolucionando de manera sólida, vamos avanzando en los ensayos clínicos… La compañía tiene dos pilares fundamentales, es una compañía que reduce el riesgo tecnológico por tener una parte de su actividad en enfermedades del sistema nervioso y otra parte de su actividad en enfermedades oncológicas, en las cuales vamos a presentar dentro de unos días los resultados finales de ALICE, el ensayo que hemos hecho en leucemia, en primera línea, con pacientes que no son elegibles para quimioterapia. Hemos reportado sistemáticamente, la última vez en junio en el Congreso Europeo, con unos muy buenos resultados.
En el congreso de septiembre de ASH, la Asociación Americana de Hematología, que se hace en Nueva Orleans, nos han seleccionado para hacer una presentación oral, lo cual es un subidón de buenas vibraciones porque es un congreso muy concurrido, donde hay casi miles de presentaciones científicas de diferentes grupos que trabajan en las enfermedades hematológicas en todo el mundo y solamente unas cuantas son escogidas y el hecho de que hayan sido seleccionados nuestros datos finales del ensayo, nos llena de satisfacción. Va a ser una presentación que hará una de las investigadoras principales del ensayo, la Doctora Olga Salamero, del Hospital Valle de Hebrón.
Lanzamos además el segundo ensayo de leucemia, que lidera el Massachusetts General Hospital y estamos esperando poder anunciar pronto los primeros pacientes.
En el sistema nervioso central, después de unos inicios que con la pandemia habían puesto en problemas el reclutamiento, ahora estamos reclutando extraordinariamente bien y esperamos, para marzo o abril, poder reportar al mercado el primer análisis de nuestro ensayo en trastorno límite. Creemos que podremos leer este ensayo a finales del 2023. Es un ensayo en fase 2b que puede transformar la compañía.
Desde el punto de vista de negocio, la compañía está yendo bien dentro de un entorno macroeconómico inestable ajeno al negocio.
¿Cómo se encuentra el proceso de incorporación al Nasdaq? ¿Podremos verlo antes de que termine el 2022?
Carlos Buesa: Es un proceso que tiene dos partes, la preparación interna de la compañía, donde, a petición de la CNMV, hicimos una aclaración en nuestras cuentas del año pasado haciendo saber que la compañía había invertido una cantidad notable de recursos en preparar la empresa por dentro para estar en el Nasdaq. Hemos hecho un trabajo importante en la adecuación o conciliación de la contabilidad española a la americana, hemos hecho un trabajo importante con asesoría legal…
Por otro lado, están las condiciones de mercado, que en estos momentos son negativas y sería ilusorio transmitir la idea de que en estos momentos es fácil o posible, para una empresa europea, hacer una salida al mercado. Con toda probabilidad, no ocurrirá este año, pero seguimos trabajando para que pueda hacerse en algún momento en el futuro.
Hay que tener en cuenta tres consideraciones: la de los preparativos contables y formales, que son muy estrictos. A pesar de que los niveles de la CNMV son muy altos, los del regulador americano lo son más todavía y hay que hacer un esfuerzo adicional. Por otro lado, el macroentorno de los mercados.
Y como tercer punto, la madurez del pipeline y los fundamentales de la compañía. En estos momentos, la compañía tiene por fundamentales todos los requisitos que serían históricamente necesarios para graduarse en una academia tan exigente como es el Nasdaq, pero hay que ser pacientes.
En medio de este clima de incertidumbre e inestabilidad, ¿cómo se está defendiendo el sector biofarma? ¿y Oryzon?
Carlos Buesa: Por primera vez en muchos años estamos viviendo un escenario opuesto al tradicional. Históricamente, el sector biofarmacéutico había venido siendo un sector refugio y esto lo vimos de una manera muy palpable durante la pandemia, pero después, por una serie de razones que son largas de explicar, ha habido, a nivel global, una salida importante de recursos del sector biofarmacéutico para volver a alimentar una serie de sectores que se habían quedado anémicos (utilities, servicios…) que han retomado con mucho ímpetu la actividad económica (líneas aéreas, sector de la restauración, ocio…)
La situación es, en estos momentos y a nivel global, que ha habido una salida relativa de fondos del sector biofarmacéutico. No obstante, es cierto que estamos viendo en las últimas semanas y el último mes, señales de que estamos probablemente tocando fondo en esta especie de comportamiento anticíclico que ha tenido el sector y que hay señales que indicarían que, para finales de este año o principios del siguiente, podemos empezar a ver una remontada del sector biotecnológico en general. En este aspecto, me gusta ver el vaso medio lleno, pero es cierto que sería absurdo negar, porque las métricas están ahí, cuál ha sido el comportamiento del sector biotecnológico a nivel mundial.
A nivel de Oryzon, hemos tenido la virtud de saber defendernos en una situación que estábamos con una buena fortaleza de tesorería, con un buen balance y habernos reforzado con estos instrumentos que en su momento anunciamos al mercado, como las notas convertibles, lo cual nos ha dado una tranquilidad adicional. Por lo tanto, podemos concentrarnos, en estos momentos en los que la mayoría de nuestros pares están muy preocupados por la situación financiera global, en la ejecución de los ensayos clínicos y el desarrollo de los fundamentales.
Aquí hay una visión realista. El sector ha pasado por un periodo de tres o cuatro trimestres malos mundialmente. Oryzon estaba bien armada y se ha defendido bien. El trabajo que ha hecho la dirección financiera de la compañía ha sido ejemplar y tenemos en estos momentos una situación, dentro de la incertidumbre general, de relativa tranquilidad.
¿Cuáles son sus previsiones para el cierre del ejercicio? ¿Y de cara al próximo año?
Enric Rello: Es bastante previsible la continuidad. Vamos a enfocar las inversiones principalmente en los dos grandes ensayos clínicos que tenemos como es PORTICO y FRIDA y vamos a mantener un ritmo comedido, porque no estamos en estos momentos para hacer grandes excesos, pero vamos a tener una continuidad más o menos histórica, quizá por la evolución de los proyectos, un poco menos de crecimiento en la parte de inversiones, pero motivado por el propio estado de los ensayos clínicos.