Este domingo anunciaron la venta del parque eólico Hinojal, una instalación situada en la provincia de Cádiz, con una capacidad instalada de 26 megavatios. ¿Por qué han hecho esta desinversión y donde tienen puesto el foco de crecimiento ahora mismo?
Como ya anunciamos a principios de año esta operación se enmarca en el plan de desinversión y desapalancamiento de la compañía. Nosotros hemos dicho siempre que nuestro foco es el cliente final, generamos energía para enviársela al cliente final y, en ese sentido, nuestra compañía está enfocada a generar la energía más barata en cada uno de los mercados en los que estamos presentes. Tenemos parques eólicos con tecnología más antigua que están en un marco regulatorio legislado por el gobiernos y sujetos a prima, y creemos que podemos hacer una rotación de activos porque estos parques están muy bien valorados por los fondos de inversión, y destinar esos fondos que obtengamos a desarrollar los parques fotovoltaicos que estamos poniendo en marcha en el 'pipeline' actual. En ese sentido, la energía fotovoltaica en el sur de Europa obtiene más radiación que el recurso eólico en España, Portugal e Italia. Creemos que la energía que dispondremos con estas nuevas inversiones será más barata y podremos tener más capacidad competitiva para vender esa energía a los clientes finales.
Han cerrado también un acuerdo en el que Innogy les suministrará 100 GW/h anuales. ¿Es más rentable ahora mismo cerrar estos acuerdos que gestionar parques propios?
La idea es obtener la energía más barata, a partir de ahí hemos de decidir si queremos depender de un tercero, como es el caso de la firma de un PPA donde nosotros adquirimos la energía por mediación de la inversión de un tercero que nos pone a disposición esa energía durante un plazo de 10-20 años; o bien lo desarrollamos 'in house' con nuestros propios 'partners'. Por un tema de estrategias preferimos tener o compartir las dos vías de crecimiento, tanto crecimiento orgánico mediante generación propia 'in house' gestionada, construida y operada por nosotros, y por otro lado también acudir a la estrategias de PPAs donde somos líderes en Europa y donde estamos sacando grandes frutos de una estrategia que nos permite crecer en ebitda de forma exponencial sin prácticamente exponer nada de capex. La estrategia de los PPAs que empezamos a desarrollar hacer dos año está empezando a dar frutos ahora.
Innogy, aunque mucha gente no la conozca, es la antigua RWE, que es el principal actor renovable alemán. Para nosotros es un hito, no por la capacidad del PPA, sino por la entidad del inversor que está poniendo a nuestra disposición la energía y este contrato marca se enmarca dentro de un acuerdo global con Innogy donde queremos colaborar en otros países. Para nosotros es muy importante no solo crecer en Italia, España y Portugal, sino acceder a la energía barata que nos puede proporcionar inversores como Innogy en países del norte como Holanda, Polonia o Alemania. Dentro de este acuerdo de colaboración estamos muy satisfechos con este PPA y creemos que es un hito, se enmarca dentro de los dos gigavatios de energía procedentes de este tipo de acuerdos que tiene a disposición nuestra compañía, y eso es lo que nos ha permitido incrementar básicamente nuestro beneficio y nos va a permitir seguir con esta estrategia e incrementar nuestro ebitda los próximos meses y años.
En su reciente asamblea de bonistas aprobaron también el reparto de dividendo por primera vez en la historia. ¿Qué supone esto para Audax?
Nosotros en el equipo siempre hablamos que las cosas hay que hacerlas poco a poco pero hay que ir avanzando. En este sentido, nosotros siempre hemos estado a favor del reparto de dividendos. Cuando hicimos la OPA en 2016 ya dijimos que uno de los intereses de la compañía era el reparto del dividendo y ponerla en la senda de crecimiento. Empezamos primero ordenando lo que teníamos, luego marcando una estrategia clara que es la que estamos abordando ahora y dentro de esta estrategia hemos tenido que hacer varias cosas: primero salir de pérdidas y entrar en beneficios y luego adaptar la compañía y acuerdos con los diferentes inversores para que se nos permita repartir un dividendo relativamente interesante. Tenemos muchas ganas de aprobar un dividendo de cara al año que viene y en esa linea estamos trabajando.
Tienen decidido aumentar el capital flotante en bolsa y pasar de un 10% a un 25%. ¿Cómo lo van a hacer?
La situación actual del 'free float', que entendemos que es una anomalía a subsanar, tiene varias vías de solución. Por un lado, la ampliación de capital a día de hoy está descartada. La segunda vía consiste en que nuevos proyectos se incorporen a la cartera global de Audax y eso hagan diluir mi participación, que supone el 90%. O bien que yo vaya deshaciendo participaciones en el mercado lentamente para que no afecte demasiado a la acción y se vaya abajo. Vemos que tenemos una fórmula de crecimiento que pasaría por dar entrada en la filial de generación a algún fondo de inversión y darle una participación minoritaria que nos permitiera aportar ese 'equity' a las nuevas sociedades de generación sin tener que hacer ampliación de capital. Lo más saludable que creemos puede ser es incorporar nuevos proyectos combinado con una venta paulatina de mi participación en el mercado de capitales.
En la asamblea de bonistas también aprobaron cambios en las emisiones de bonos para equiparar las condiciones de la diferentes emisiones. ¿Son cambios importantes para el inversor que no conozca mucho Audax?
Para el inversor en acciones obviamente no, para el inversor bonista que seguramente acudió y estuvo informado en la asamblea, básicamente se abordaron cambios de definiciones. Había un concepto por ejemplo de EBITDA en los diferentes bono. También se abordó un problema que fue fruto de la fusión inversa y que fue que realmente el titular del bono, que era Audax Energía, desapareció en la fusión inversa, con lo cual se tuvo que redefinir cada uno de los bonos. De cara al bonista lo más relevante fue una decisión que tomamos que fue equipar la deuda con recurso a la deuda sin recurso.
Hace poco también presentaron sus cuentas hasta septiembre: beneficio de 18,5 millones frente a los 1,9 del pasado año, con crecimiento de doble dígito tanto en ingresos como en EBITDA. ¿Cómo se consiguen estos resultados?
El equipo ha trabajado mucho la estrategia que tenemos bien marcada a largo plazo y que empezamos hace tres años. Tenemos una estrategia clara que se basa en dos líneas: la primera es mejora de ingresos vía crecimiento orgánico, que es lo que hemos hecho desde el principio. Y eso lo hemos crecido cliente a cliente y por vías digitalización, canales de distribución, mejoras de procesos... eso es lo que nos ha permitido crecer a doble dígito. Nosotros adquirimos un año después de la OPA a nuestro mayor competidor en España, que era una eléctrica, que en aquellos momentos tenía un EBITDA de 12 millones; este año, dos años después prácticamente, cerrará con 20 millones. Eso significa que sin haber hecho una ampliación de capital en una eléctrica hemos sido capaces de doblar el EBITDA y eso es lo que nos permite crecer a doble dígito en muchas áreas de nuestra compañía.
La gran virtud de Audax es que al final del ciclo de valor tenemos clientes a los que podemos vender luz, pero también eficiencia, autoconsumo... y ahora estamos en un momento muy dulce porque hay muchas cosas que cambiar en el mundo de la energía. No somos una generadora pura pero sí que somos una empresa que cada día tenemos relaciones comerciales con 350.000 clientes en 8 países europeos y esos clientes demandan otros servicios, que generan EBITDA, con lo cual la venta cruzada y el crecimiento orgánico nos permite crecer en ingresos de una forma recurrente a doble dígito, que es lo que nos reconoce el mercado.
Audax es una compañía que históricamente ha crecido, que resta en una fase crecimiento muy disruptiva y además cuenta con la ventaja de tener una anomalía en los mercados energéticos fruto de la transición energética que ha dado lugar a que se desacople el precio de venta con el precio de compra, lo que significa que durante los años que se tarde en implementar la transición energética de carbón nuclear a renovables se vende al precio de carbón y se compra a precio de renovables. Y eso amplía disruptivamente el margen y es lo que está viendo nuestro EBITDA. Por un lado crecemos en ingresos, pero por otro nuestros costes de generación fruto de los acuerdos de PPA y de generación propia se están reduciendo considerablemente, lo que hace que nuestro margen y nuestra captura de EBITDA se incremente.
Hay que tener en cuenta que de la parte de generación propia tenemos 0 puesta en marcho. Vamos a empezar a construir los primeros 300 megavatios a principios de año, y de la parte de PPAs de los 2.000 megavatios prácticamente tenemos puestos 300 en marcha, lo que significa que con un 10% de los megavatios de PPA ya puestos en marcha hemos logrado el resultado histórico que publicamos recientemente. Esperamos que 2020 sea un año bueno para Audax y que los PPAs sigan poniéndose en marcha.