Después de que el euro marque máximos interanuales respecto a la libra y se sitúe en la zona de 0,9325 a 0,9270 euros, ha retrocedido y se ha apoyado en la base de un soporte importante, que es la zona de 0,8302 a 0,8276 euros. A partir de ahí ha habido un rebote en la libra, se han creado algunas formaciones de giro al alza, como son las envolventes alcistas. Se han activado señales de compra, y por eso hemos puesto atención en el cruce.
Se ha despejado un poco la incertidumbre respecto al Brexit, ya que se ha alejado la opción de un Brexit duro, y la infravaloración que tenía la libra respecto al euro se ha corregido. Ahora ha alcanzado la divisa en términos de paridad de poder adquisitivo, que es una aproximación que se utiliza para ver si una divisa está más o menos sobre o infravalorada. Yo creo que ahora la libra está cotizando, más o menos, a su justo precio.
La libra puede sufrir nuevas caídas
Sin embargo, a partir de ahora parece que la presión se puede volver en contra de la libra y a favor del euro, y que este rebote pueda coger más fuerza hasta que supere la zona de 0,8520 euros. Nos estamos encontrando con que la debilidad macroeconómica, viendo los índices de actividad empresarial, se mantiene mucho en la economía de Reino Unido. Los PMIs de Reino Unido están en niveles muy bajos, y esa debilidad económica favorece al euro frente a la libra.
Otra de las razones que nos hacen pensar que ese rebote puede ir a más es que las confianzas de los consumidores también son mayores en Europa que en Reino Unido. Además, cuando hablamos de incertidumbre política, pese a que se está despejando esa incertidumbre en Reino Unido, continúa siendo mucho más elevada que en Europa. En un momento determinado, si vuelven los nervios o la situación se tuerce, puede haber una confirmación de este giro al alza, esta señal de compra por encima de 0,8520 euros.