La incertidumbre continúa arribando en los mercados financieros, una vez que los bancos centrales tomaron sus respectivas decisiones sobre los tipos de interés, dejando abierta la puerta a nuevas subidas antes de finalizar el año a ambos lados del Atlántico. Además, las palabras de algunos de los banqueros centrales no gustaron a los inversores, al dejar caer la posibilidad de mantener los tipos de interés altos durante más tiempo.
Todo lo anterior se tradujo en un incremento del Índice de volatilidad (VIX) en los últimos días, pero no podemos olvidar que, desde los mínimos de septiembre, el VIX ha acumulado un incremento cercano al 40%, rompiendo en la jornada de ayer los máximos del pasado mes de agosto (18,90$) y dejando una nueva resistencia en septiembre en los 19,50$. Sin embargo, el VIX se ha topado con una directriz bajista de medio plazo, la cual viene uniendo los máximos decrecientes desde septiembre del año 2022.
Seguidamente, los rendimientos de los bonos americanos tampoco se han escapado de la volatilidad, especialmente el US10Y, superando en los últimos días la cota del 4,55%, un nivel que no visitaba desde octubre del año 2007 debido a los temores de una recesión y unos precios del petróleo que intensifican las presiones inflacionistas. Sin abandonar el mercado de renta fija, el US02Y también establecía hace unos días máximos de junio del año 2007 al romper la cota del 5,20%.
Finalmente, con el panorama económico actual, no podemos descartar mayores movimientos en el VIX, sobre todo, si consigue consolidar los niveles mencionados, teniendo la siguiente resistencia en los 22$, máximos del pasado mes de mayo, quedando algo “lejos” pero no imposible los máximos del año (30$) tras los problemas de los bancos regionales, otra situación que no deberíamos de olvidar.