En el vídeo expuesto durante la presentación se deja evidencia de que "hemos construido nuestro mundo de tal forma que necesitamos contaminar para vivir. Tenemos la oportunidad de elegir la dirección correcta. Los combustibles fósiles como el petróleo, el gas o el carbón constituyen una parte importante de nuestra vida diaria. Actualmente el 80% de nuestro consumo de energía proviene de combustibles fósiles. Pero existe una alternativa. Cuando hablamos de dióxido de carbono, la fuente más contaminante es el carbón. Para producir la misma cantidad de energía, el carbón genera el doble de dióxido de carbono que el gas natural. El CO2 es uno de los principales gases de efecto invernadero. En los últimos 150 años el nivel de dichos gases se ha incrementado y, en ese mismo período de tiempo, se ha producido un calentamiento global. Sin embargo, no hay que olvidar que nivel global los costes derivados de ignorar el cambio climático en el año 2100 excederán en billones de dólares a los costes derivados de tomar medidas contra el cambio climático"
Actualmente es posible obtener rendimientos invirtiendo en empresas que ofrecen soluciones en el futuro. Existen numerosas oportunidades, como empresas que producen energía verde y que consumen menos energía al producir de forma inteligente o medios de transporte más eficientes. "Para nosotros se trata de invertir a largo plazo ye generar rentabilidad con responsabilidad", reconoce Castro.
Dentro de la importancia que le dan a esta temática, viendo que es un problema que ya está con nosotros, "hay una parte positiva a la hora de invertir que son los incentivos. Como el incentivo político, pues la mayoría de países tienen medidas para luchar contra el cambio climático pero también está el apoyo del consumidor final, que está constantemente presionando a la empresa para que tome medidas en su lucha contra el cambio climático". Hace cinco o diez años no teníamos la conciencia que tenemos hoy en día del reciclaje, incluso los niños pequeños saben dónde reciclar, cuándo y cómo. Además hay temas como el de la comida orgánica, bicicleta y coche eléctrico… "pero nosotros llevamos a cabo una gestión bastante activa porque no invertimos en empresas verdes o que tengan baja emisión de CO2 sino que invertimos en empresas que ofrezcan soluciones para que otras empresas puedan ser socialmente responsables con el medio ambiente y además, ahorrar en recursos". Todo ello con un enfoque global buscando la eficiencia de recursos, protección del medio ambiente y energía alternativa. Siendo global porque puede dar mayores soluciones y posibilidades.
Y a la hora de hablar de este fondo,se suele pensar que la empresas forman parte de un mercado nicho pero, si echamos un vistazo al universo de inversión, se aprecia que el universo de compañías que luchan contra el cambio climático tiene una capitalización superior a potencias como Reino Unido o Suecia, quedándose tan sólo por debajo de potencias tan importantes como China. Pero vistos los incentivos – políticos y del consumidor final – para ellos el mayor incentivo es el económico. Es decir, "nos centrarnos en empresas que hagan que otras empresas puedan ganar en recursos y ser socialmente responsables". Por ejemplo, la construcción de un avión tiene un impacto medioambiental de un 0,08%, prácticamente nulo, pero lo que de verdad tiene un impacto medioambiental alto es el uso del avión. Es por ello que "nos planteamos cuánto supondría para una empresa aeronáutica un ahorro del 40% del combustible. Y ahí es donde vemos el incentivo económico porque no invertimos en la empresa aeronáutica sino que invertimos en una empresa que se llama Hexcel, que crea materiales de fibra de carbono. Un avión al tener material de fibra de carbono será más ligero, pesará menos y ahorrará un 20% de combustible. Con ese 20% de ahorro la empresa aeronáutica ahorrará 33.700 millones de dólares y ahorrará 633 millones de barriles de combustibles. Con lo que invertimos en empresas que quieren ser responsables con el medio ambiente, quieren luchar contra el cambio climático y a la vez reducir sus costes y ser más eficientes".
Si se habla de rentabilidades, esta experta reconoce que lanzaron el fondo en 2008, "tenemos las cinco estrellas Morningstar y desde lanzamiento estamos batiendo a la renta variable ecológica en cualquiera de los períodos. Si se compara con el MSCI World, la estamos batiendo en períodos de 1-3 y 5 años", concluye.