Después de una década desde el primer impulso de las energías renovables en España, con sus valoraciones y sus críticas, por fin podemos afirmar que hemos llegado. Hemos llegado a un momento en el que el mercado o, mejor dicho, la sociedad en su conjunto está unida en el desarrollo del mercado energético.
El autoconsumo fue considerado años atrás (aunque tampoco hace tanto tiempo de esto) como un enemigo del sistema, mientras hoy se presenta como la solución, no solo a nivel nacional sino también desde una perspectiva global. El sector, que actuará como el motor de cambio en la transición energética, está viviendo un buen momento. La demanda de instalaciones fotovoltaicas, tanto para empresas como para particulares, no ha dejado de crecer desde hace un año. El encarecimiento del coste de la luz ha situado al autoconsumo como una de las alternativas más eficaces para conseguir una reducción de los gastos. A esto se suma también la obligatoriedad de las empresas de implantar políticas de ESG para disminuir su volumen de emisiones o huella de carbono, optando por el consumo de energía solar fotovoltaica.
Por ello, la figura de prosumidor ejercerá como eje central de la generación distribuida. No obstante, ante este nuevo modelo energético siguen siendo necesarios varios cambios para asegurar el correcto desarrollo e implantación del autoconsumo, puesto que el sistema, a día de hoy, no está preparado para gestionar de forma eficiente los excedentes de producción de las plantas de autoconsumo o el acceso del mismo, como se plantea en el PNIEC (Plan Nacional Integrado de Energía y Clima). Estamos en un punto en el que la regulación no sigue el ritmo de la realidad de sector. Necesitamos mayor agilidad y simplificación en los trámites administrativos y, sobre todo, en los trámites referidos a los puntos de acceso y conexión. El sector precisa desarrollo normativo y visión a largo plazo para no volver a quedarnos atrás.
Los objetivos recogidos en la Hoja de Ruta de Autoconsumo o PNIEC son interesantes, pero es necesario encauzarlos, que la normativa proporcione seguridad al sector. De lo contrario, no será factible llegar a las cifras establecidas, principalmente por los problemas actuales de acceso y conexión a la red.
EiDF, líder en autoconsumo industrial
En este contexto, nuestra empresa, EiDF ha venido desarrollando su actividad desde hace más de una década, pasando por los momentos más duros del sector hasta llegar al presente. Con nuestro esfuerzo y fiel creencia en lo que hacemos, hemos conseguido situarnos como líderes del sector de autoconsumo empresarial con cerca de 3.000 obras ejecutadas que suman 300 MW de energía solar. Lo nuestro es una realidad.
Actualmente, tras apostar firmemente por una estrategia de integración vertical, nos hemos convertido en un operador integral del mercado energético. A nuestra actividad originaria de autoconsumo, hemos sumado la generación y la comercialización con el fin de aprovechar las sinergias entre las tres unidades de negocio y ofertar así un servicio completo a nuestros clientes.
En 2021, gracias a nuestra posición dominante en el sector, hemos podido afrontar con éxito y seguridad la actual situación de demanda. Así, logramos incrementar en un 27,5 % nuestra cifra de negocio en autoconsumo con 63,1 MW ejecutados. Desde septiembre de 2021, hemos multiplicado por cinco los pedidos de autoconsumo en industrial. Tanto es así que a finales de 2021 ya cerramos el objetivo de ventas para el presente ejercicio. Y actualmente ya hemos cumplido con las cifras de ejecución de obra marcadas para todo el año.
La facturación global del Grupo registró un incremento del 128 % en relación con el ejercicio anterior, alcanzando los 45,6 M€. Por su parte, el EBITDA anual creció un 335 % con respecto a 2020, logrando superar los 10,4 M€. Los resultados cosechados son el reflejo de nuestro trabajo y de los objetivos establecidos en nuestro plan de negocio.
En el área de Generación, contamos con un pipeline sólido de más de 2GW. Este año pondremos en operación nuestros primeros parques de generación con el objetivo de impulsar así la integración vertical. La energía generada en nuestros parques se destinará al suministro de nuestra división de comercialización, reforzada tras la adquisición de ODF Energía.