Analiza en su última carta mensual la situación de la banca, ¿cree que los episodios de turbulencias que hemos visto en las entidades regionales de EEUU ya están olvidados? ¿Hay riesgos en los bancos europeos?
Creo que no hay riesgos para los bancos europeos porque son muy distintos de los bancos americanos que han tenido problemas. Y en América si hay algún problema será aislado y tendrá una solución rápida. Los bancos europeos tienen una clientela diversificada, muy amplia y con una base de depositantes que, individualmente considerados, tienen pocos depósitos cada uno y con una base de créditos también muy diversificada. Los problemas que hubo de concentración en Estados Unidos no los va a haber. Creo que la banca europea tiene que tener un muy buen comportamiento bursátil, mejor que la americana incluso, dado su carácter mucho más minorista y el hecho de que partimos de tipos negativos para ponerlos en tipos de un ciclo medio que parecen ahora muy altos pero que en una perspectiva histórica tampoco son tan altos. La banca europea con cualquier escenario Euribor por encima del 2%, y probablemente lo tengamos entre el 3 y el 4% durante un par de años como mínimo, ganaría bastante más dinero que gana. Por tanto, diría que es un sector que coyunturalmente en una perspectiva de dos años tiene que tener una evolución muy favorable de resultados, donde el incremento del margen financiero será muy superior a la pequeña alza de morosidad que puede derivarse de una ralentización económica.
Los tipos de interés están llegando a su fin, sin embargo la banca aún cotiza con descuento, ¿qué estrategia sería más conveniente seguir con los bancos europeos, comprar más o mantener?
Creo que el que no tenga comprar y el que ya tenga, como es mi caso, mantenerlo, pero mantenerlo con un nivel de ponderación superior al que tiene la bolsa. La banca europea ahora mismo en el Euro Stoxx 50, por ejemplo, no pesa más de un 10% del índice y yo tengo unas posiciones que superan claramente el 20%. Hay que tener el doble del peso de banca por lo menos, incluso algo más, en una coyuntura como la que se nos presenta. Pero banca estrictamente minorista, es decir, banca que se dedique a coger depósitos de los clientes, de unos clientes muy diversificados, y de los préstamos hipotecarios, préstamos a consumo o préstamos a pymes. La banca de inversión es mucho más volátil en sus resultados y probablemente no sea la mejor opción. Pero los grandes bancos europeos en general y sobre todo los españoles tienen un perfil muy minorista y todos ellos encajan en nuestra estrategia de inversión para estos momentos.
El fondo Abante European Quality Fund está presente en el sector del lujo vía LVMH, Kering o L’Oréal. Tras las últimas caídas de mayo, ¿cree que sigue habiendo oportunidades?
Sí, hemos visto caídas en mayo pero luego una recuperación relativamente rápida en algunas de estas compañías en los primeros compases de este mes de junio. Creo que el sector de lujo cotiza unos múltiples razonables en algunos casos o incluso algo bajos como es el caso de Kering, y los que parecen algo más altos como es LVMH tenemos que tener en cuenta que tiene una gama de productos muy diversificada que le da una mayor estabilidad y sobre todo una estrategia de crecimiento de precios que es incontestable. En este entorno de inflaciones altas, estas empresas son capaces de repercutir las subidas de precios por encima de la inflación sin que merme la capacidad de comprar sus clientes. Quienes compran este tipo de productos no tienen problemas de dinero básicamente y no tienen problemas de pagar una hipoteca más cara porque no pagan hipotecas y lo que tienen es más dinero en el banco que está produciendo más rentabilidad; además, la clase media alta en los países emergentes sigue creciendo a unos ritmos bastante importantes. Por tanto, los múltiplos que son aparentemente altos no los son tantos si tenemos en cuenta la gran rentabilidad sobre recursos propios que tiene y la capacidad que tiene este sector para pagar dividendos y la seguridad de sus resultados. Creo que sigue siendo una buena apuesta. En algún caso, por ejemplo, habíamos tenido alguna compañía mucho más cara como Hermes, que cotizaba más de 50 veces beneficio, y la vendimos cuando alcanzó esas valoraciones; si tuviera un recorte la volveríamos a comprar, pero creemos que pagar múltiplos de menos de 20 veces como en el caso de Kering o de algo más de 30, como es el caso de Louis Vuitton, es algo perfectamente razonable.
Una de las temáticas ganadoras este año en las bolsas es la inteligencia artificial. En el fondo ASML, Infineon, ST Microelectronics… están ligados indirectamente a esa megatendencia. ¿Les ven aún bastante potencial?
Sí, nosotros somos inversores claros en semiconductores. Es cierto que de las tres compañías que citas, una desde luego está muy involucrada, que es ASML Hldg Br y fabrica las máquinas que luego fabrican los semiconductores, y sobre todo los de tamaño más pequeño que son los que van a estar más en relación a la inteligencia artificial. Y, sin embargo, las compañías en conductores que tenemos, como son Infineon o STMicroelectronics, aunque tienen semiconductores de toda la gama, son especialmente fuertes en sectores que no están tan ligados a la inteligencia artificial, pero sí a la digitalización creciente de todo tipo de maquinaria, empezando por ejemplo por la automoción. Por lo tanto, creemos que a través de estas tres inversiones, tenemos una exposición al incremento de digitalización en general, y también la inteligencia artificial en el caso de ASML, que puede ser interesante.
Otro sector que pesa bastante en Europa y en el fondo es el automovilístico con BMW, Mercedes o Stellantis. Tras años de duros ajustes, ¿qué ha cambiado para que el mercado no penalice tanto al sector?
El mercado no se ha comportado tan mal este sector en lo que va de año. Si lo vemos en una perspectiva larga no lo ha hecho tan bien, pero en los últimos meses no está teniendo un mal comportamiento en general, sobre todo las dos marcas más relacionadas con el lujo como son BMW y Mercedes. Stellantis es un actor más generalista y está bastante más estancado en este momento, aunque nosotros pensamos que los planes de reestructuración industrial que tiene le van a situar en una situación de incrementar de manera notable su rentabilidad. Pero en el caso concreto de BMW y Mercedes no han tenido un mal comportamiento y creemos que lo van a seguir haciendo bien, porque está claro que estos actores son perfectamente capaces de incrementar los precios a un ritmo muy superior a la inflación y que el proceso de electrificación lo están siguiendo de una manera pautada, a través de híbridos enchufables y que no les está creando una gran distorsión en sus cadenas de producción. Pensamos que estas dos marcas tienen una posición muy defensiva frente a nuevos actores en el mercado eléctrico y que la transición no será tan rápida como la gente piensa. Hasta el año 2035 tendremos fabricación de coches de combustión interna y a partir de 2035 es cuando en principio entra la prohibición. Está claro que vamos hacia un escenario de coches eléctricos o quizás coches de hidrógeno, pero estas marcas están teniendo un buen ritmo de adaptación a las nuevas necesidades y cuando todo tenga que ser eléctrico o hidrógeno, estarán perfectamente listas para estar ahí y defendiéndolo con los precios muy altos que les confiere su posición de atractivo especial entre los consumidores de buen poder adquisitivo.
El petróleo cae pese a los recortes de producción de la OPEP, ¿confía en la recuperación de Total? Es algo que también le sucede a Repsol…
TotalEnergies ha tenido un comportamiento muy pobre en lo que va de año, como los petroleras en general, porque el crudo se ha estabilizado en unos niveles inferiores a los que el mercado esperaba. De todas maneras, si el petróleo se mantuviera en niveles de 70 dólares, creo que las compañías petroleras seguirían teniendo un buen comportamiento bursátil. La cuestión es que no baje de este nivel. En este nivel las compañías petroleras siguen ganando muchísimo dinero y lo suficiente como para pagar las altísimas rentabilidad por dividendo del 7 - 8% que están ofreciendo a los inversores. Por tanto, desde un punto de vista de tener algo de cartera defensiva con alta rentabilidad por dividendo, cualquier precio del petróleo por encima incluso de 60 dólares nos garantiza que estos dividendos seguirán estando.