Hace tiempo que el mercado español de empresas cotizadas no asiste a una agrupación de acciones, de hecho, el más reciente data de 2020, dato que contrasta con que en los últimos 24 meses se hayan realizado más de cien en EEUU. Es un movimiento que, a pesar de parecer una simple operación técnica, tiene numerosas implicaciones buenas para el valor y los accionistas.
Un Contra Split es una herramienta con la que cuentan las empresas cotizadas para mejorar el perfil del valor, especialmente aquellas compañías que cotizan a precios bajos o muy bajos (los comúnmente denominados ‘‘penny stocks”). El Contra Split, consiste en reducir el número de acciones en circulación y aumentar su valor nominal, obteniendo una serie de efectos muy beneficiosos tanto para las empresas como para los accionistas.
Por ejemplo, uno de esos efectos es la estabilización del precio de la acción. Con un precio más estable y una volatilidad reducida, se incrementa la solidez y la confiabilidad en el mercado, además de incrementarse el atractivo del valor para inversores que, por exigencias diversas, no consideran en estos momentos a la compañía dentro de su radar de inversión –este sería el caso de muchos inversores institucionales que no invierten en acciones por debajo de un valor unitario determinado–.
Si nos detenemos más aún en el impacto al accionista actual, aunque a primera vista el Contra Split podría parecer una operación neutra, ya que no se altera el valor total de su inversión ni el porcentaje de propiedad del accionista en la empresa, en realidad ofrece varios beneficios potenciales que no deben subestimarse:
- Al mejorar la percepción de la empresa, es más probable que fondos y grandes inversores se interesen por la acción. Esto puede impulsar su valor a largo plazo.
- Mejor información y análisis: con un mayor interés por parte de analistas e inversores institucionales, es probable que aumente la cantidad y calidad de la información disponible sobre la empresa en el mercado preparada por terceros independientes y la frecuencia de sus análisis.
- Posible mejora en la liquidez: en algunos casos un Contra Split puede mejorar la liquidez de la acción al atraer a un grupo más diverso de inversores, lo que facilita su compraventa en el mercado.
No obstante, un Contra Split no es una solución mágica ni es una medida que por sí sola marque un cambio de rumbo en la cotización de un valor. Pero sí es un paso que contribuye a crear un entorno más favorable para el crecimiento a largo plazo para algunas empresas, además de funcionar como un catalizador de un futuro más prometedor para la inversión.
Este es, por lo tanto, un paso importante para mejorar la percepción del y llegar a un universo más amplio de inversores. Grupo Dia lleva dos años y medio consecutivos de crecimiento en ventas comparables y en aumento de cuota de mercado a superficie comparable en España. Queremos que la cotización refleje este excelente desempeño. Es una medida que cuenta con el beneplácito de la mayoría de nuestros accionistas que, entre otras, la han aprobado en nuestra Junta General Extraordinaria del 27 de diciembre de 2024. Entramos en una nueva etapa de crecimiento en mejores condiciones, gracias, además, a la refinanciación acordada, un símbolo de la confianza de la banca y del mercado en la compañía.