El mercado de Bitcoin y los criptoactivos está atravesando un periodo de alta volatilidad, con pérdidas de niveles clave entre los $89,000 y $90,000 de Bitcoin , y liquidaciones millonarias en poco tiempo. Noticias como los comentarios de Trump han generado subidas repentinas, seguidas de caídas rápidas, lo que refuerza la necesidad de gestionar adecuadamente el riesgo. En este contexto, "no es un buen momento para operar con apalancamiento ni a corto plazo sin una estrategia definida. Los inversores deben ajustar su exposición según su perfil y considerar mantener efectivo disponible para hacer frente a la incertidumbre", dice Javier Molina, experto en activos digitales.
Los factores macroeconómicos están teniendo un impacto significativo en el mercado cripto. Los mercados tradicionales muestran señales de corrección, lo que afecta a Bitcoin y otros activos digitales. En febrero, los ETF de Bitcoin han registrado salidas netas, lo que indica miedo entre los inversores minoristas. Además, la política monetaria de la Reserva Federal, con expectativas de recortes de tipos de interés, junto con la fortaleza del dólar, están influyendo en los movimientos del mercado. "Lo que me preocupa es si estamos en uno de esos procesos iniciales de redistribución de activos, donde las manos fuertes van soltando y las manos débiles, con los tipos a la baja, empiezan a buscar alternativas. Así que atención a los flujos y a la volatilidad, que crea miedo pero también pánico a quedarse fuera". Las altcoins han sufrido caídas aún más pronunciadas, lo que demuestra una volatilidad extrema en el sector.
Uno de los temas más debatidos ha sido la posible creación de una “Reserva Estratégica” de Bitcoin y altcoins mencionada por Donald Trump, incluyendo XRP, Solana, Cardano y Ethereum. Sin embargo, se han detectado movimientos sospechosos antes de estos anuncios, lo que sugiere posibles intentos de manipulación del mercado. A pesar del impacto inicial en los precios, estas noticias han tenido un efecto efímero, con subidas seguidas de correcciones rápidas, lo que refuerza la idea de que los fundamentales macroeconómicos siguen dominando la dirección del mercado.
"Lo que hemos visto en las últimas dos semanas es que por fin el precio ha salido de este rango, ha sido a la baja, lo que indica que los volúmenes aumentan porque el precio sale de una zona en la que está cómodo y baja a precios donde hay mucho inversor que entra en pánico y vende pero también hay mucho inversor que aprovecha estas oportunidades para acumular más activos. Los volúmenes estas dos semanas se han disparado, algo que para el inversor menos experimentado es complicado ver cómo los precios se desploman", dice Blanch
Lo que se está viendo es que los inversores que entraron al final, o sea los inversores más novatos en este mercado, "son los primeros que entran en pánico y venden los activos en pérdidas. En cambio vemos que las ballenas o los inversores que ya llevan más tiempo y con más activos acumulados son los que están comprando estas caídas. Se están cambiando monedas entre quien entró a largo plazo y quien entró por el FOMO y ha acabado escaldado", dice el experto de Bitvavo.
En este escenario, los inversores deben definir su horizonte temporal de inversión, ya sea corto, medio o largo plazo. Una estrategia recomendada es no entrar de golpe en el mercado, sino espaciar las compras a través del método de promedio de costos (DCA). Además, es fundamental seguir de cerca la evolución de los mercados tradicionales, la liquidez disponible y la política monetaria de la Fed. A medida que el mercado se ajusta, los inversores deberían priorizar activos con fundamentos sólidos en lugar de especular con memecoins u otros activos sin valor intrínseco. En conclusión, el mercado cripto sigue siendo altamente volátil y dependiente de factores globales, por lo que la clave es una adecuada gestión del riesgo, mantener la calma y operar con una estrategia bien definida.