“Los ETFs de Lyxor ofrecen exposición al Topix japonés.
Hay que tener muy en cuenta el cambio de moneda puesto que en este producto no está cubierto el riesgo de divisa. La relación entre el yen y el euro impacta directamente en la rentabilidad”.
Carlos García recuerda que “el hecho de querer invertir en renta variable japonesa implica mayores costes al salir al exterior”. Eso sí, siempre existe la posibilidad de hacer “stock picking”, pero “esto siempre tiene un riesgo a la hora de equivocarse en la selección de los activos”. Luego, en su opinión, “la ventaja de un EFT es que replica al índice completo, al Topix, dado que diversificas el riesgo”.
Además, Lyxor cuenta también con ETFs que replican a índices de América Latina donde “hay países con mayor potencial de rentabilidad”, afirma García. “Tendríamos, en este caso, la ventaja de la liquidez puesto que replica al MSCI latinoamericano y perdemos la posibilidad de apostar por un índice concreto”.
En lo que respecta al mercado de renta fija, la pregunta obligada es hasta qué punto siguen siendo rentables los bonos españoles debido a la caída de las tasas de rentabilidad. Lyxor cuenta con un ETF de reciente creación como es el Lyxor ETF MTS Spain Government All Maturity por lo que “aún hay que darle recorrido al producto”. “Este año será crucial para este tipo de activos. La renta fija doméstica sigue echando ríos de tinta cada día y hay que valorar lo que nos aportan ETFs de este tipo en las carteras como es la diversificación”.