¿Cuál es la exposición a la renta variable tras el repunte del primer semestre?
A partir del nivel bajo de finales de diciembre de 2018, los mercados de renta variable han repuntado de manera significativa. Los inversores parecen haber aprovechado el alza de los mercados de renta variable para reducir sus posiciones.
De este modo, la última encuesta de gestores globales efectuada a mediados de junio refleja mucho pesimismo: nivel de liquidez elevado en las carteras y fuerte disminución de las previsiones de crecimiento. Esta prudencia se puede explicar fácilmente por la debilidad persistente de los indicadores económicos, la impredecibilidad de las declaraciones (tanto negativas como positivas) del presidente de Estados Unidos, y la inquietud generada por los bancos centrales en su carrera hacia la flexibilidad monetaria.
En este contexto, en Candriam se preguntan ¿debemos ceder al pesimismo que impera en el ambiente? Ellos no lo creen así y han decidido mantener una sobre ponderación en relación a la renta variable para el segundo semestre. Una recesión en 2020 no es para Candriam el escenario más probable y tras la caída espectacular de los tipos experimentada al menos desde el mes de mayo de 2019, la búsqueda del rendimiento vuelve a ser un desafío para los inversores.
La asignación geográfica es más delicada dentro del contexto actual. Continúan priorizando las acciones estadounidenses. Estados Unidos dirige el juego y el mercado estadounidense les parece protegido por una doble opción de venta: la de la reserva federal americana y la del presidente estadounidense. El banco central está aplicando todo tipo de medidas para contener la ralentización de la actividad y preservar unas condiciones financieras acomodaticias. Actualmente, la Fed está aplicando un mayor margen de maniobra en comparación con otros bancos centrales con el fin de flexibilizar su política monetaria.
Desde una perspectiva fundamental, el crecimiento estadounidense es más sólido y se refleja en el aumento de los beneficios de las empresas, al tiempo que la valoración de las acciones estadounidenses no es excesiva. Por el momento en Candriam han reducido su asignación en relación con las acciones emergentes y las acciones de la zona Euro. Las acciones emergentes son atractivas a medio plazo porque estas acciones constituyen una historia de crecimiento: en los 4 primeros sectores de acciones del índice de acciones emergentes, 3 se corresponden con sectores asociados a la tecnología, a las redes sociales y al consumo.
La zona Euro parece incluso más vulnerable, ya que dispone de márgenes de maniobra presupuestarios limitados, unos tipos que ya están en territorio negativo, y se encuentra expuesta a numerosos riesgos políticos internos y externos a la zona. Sin embargo, los inversores han integrado estos riesgos y se han alejado de la región. Este pesimismo podría paradójicamente dejar lugar a un sorprendente potencial positivo: ¿Sorpresa positiva relativa a una estabilización del crecimiento o a un apaciguamiento de las tensiones políticas? Mientras tanto, la prudencia sobre la zona Euro se expresa a través de un descuento récord de las acciones de estilo «value» con respecto al estilo «crecimiento».
La asignación de obligaciones de Candriam favorece la búsqueda del rendimiento. El giro de 180 grados del banco central de Estados Unidos, que ha pasado de una fase de normalización a una fase de flexibilización monetaria, ha tenido un impacto sobre su asignación en renta fija. Según Nadege Dufosse, Head of Asset Allocation en Candriam: "La búsqueda del rendimiento vuelve al centro de nuestras decisiones de asignación. La probabilidad estimada de recesión en el transcurso de los doce próximos meses es limitada, lo que nos abre la oportunidad de invertir en activos con un mayor riesgo y que ofrecen un potencial de mayores retornos. Actualmente concedemos prioridad al crédito High Yield europeo y a la deuda emergente denominada en dólares en una cartera diversificada".
Proteger de manera más estructural nuestras carteras
Se está entrando en una fase más incierta del ciclo económico con numerosos riesgos políticos y con unos efectos de comunicación imprevisibles. A los expertos de la gestora les parece necesario introducir determinadas protecciones de manera más estructural. Estas protecciones se pueden encontrar en la exposición a determinadas divisas como el yen, que ha jugado bien este papel desde el inicio del año.
El oro constituye asimismo una protección eficaz en el entorno actual. También se pueden tomar en consideración compras de volatilidad. La volatilidad apenas ha aumentado en mayo, a pesar de la bajada de los mercados de acciones y del resurgir de las tensiones comerciales con China. El camino hacia la flexibilización monetaria emprendido por los grandes bancos centrales ha eliminado otra vez la volatilidad. Sin embargo, saben que si el riesgo de recesión se convierte de nuevo en un tema de inquietud para los inversores, la volatilidad se va a incrementar, y esta clase de activo constituye una cobertura eficaz frente a una pérdida de confianza en la acción de los bancos centrales.
En conclusión, en Candriam "nos hemos vuelto más prudentes en mayo y hemos vendido un poco, tratando de ser más selectivos y con un enfoque de mayor seguridad. No obstante no renunciamos y mantenemos la sobreponderación en renta variable americana, renta fija High Yield y la deuda emergente. Además hemos introducido algunas estrategias de cobertura en nuestras carteras y estamos preparados para adaptar nuestras asignación a cualquier noticia decisiva en materia política o económica".