La firma ha realizado una encuesta a85 bancos europeos de 23 países para analizar el impacto de las potenciales subidas de tipos. Al respecto, señala que la mayoría de los bancos europeos ya ha informado de incrementos en sus márgenes de intereses en el primer trimestre gracias al aumento gradual que se está experimentando en los tipos de interés a corto y largo plazo.
También recuerda que el aumento de la inflación ha llevado a varios bancos centrales de la región a elevar los tipos, como es el caso del Banco de Inglaterra. Además, el Banco Central Europeo (BCE) ya ha adelantado que hará lo mismo a partir del próximo mes de julio.
En este sentido, los analistas de S&P Global Rating prevén que el BCE podría aplicar incrementos trimestrales de 25 puntos básicos, con el objetivo de alcanzar una tasa de interés neutral para los programas de operaciones de recompra ('repos') del 1,5% a finales de 2023, lo que representaría un aumento de 150 puntos básicos respecto a los niveles actuales para los 'repos' y de 200 puntos básicos para los dépositos.
En cuanto al Banco de Inglaterra, recuerda que la institución ya ha elevado el tipo de interés del 0,1% en diciembre de 2021 al 1% en mayo, y prevé que alcance el 1,75% a lo largo de 2024.
Así, prevé que se incrementen los márgenes de interés de la mayoría de bancos europeos, si bien habrá diferencias en el impacto. En concreto, el informe destaca que la banca británica y la italiana serían las más beneficiadas con una subida de tipos de 200 puntos, ya que sus márgenes de interés se impulsarían de media más de un 25%.
Por detrás, estarían las entidades españolas, alemanas y austriacas, con un impacto positivo de entre el 10% y el 16%, mientras que el aumento medio en la banca francesa y holandesa estaría por debajo del 10%.
Sin embargo, la encuesta señala que el aumento real de los ingresos netos por intereses también dependerá de dos factores clave que pueden impactar de forma desigual en Europa: por un lado, la magnitud y velocidad de la subida de tipos, y por el otro, la fortaleza de los préstamos en un contexto económico "debilitado".
Además, recuerda que el entorno de elevada inflación posiblemente llevará a un aumento de los costes operativos y crediticios para los bancos, si bien las proyecciones se han realizado con un escenario de normalización de la inflación en 2023 y un aumento "limitado" del desempleo.
De esta forma, S&P Global Rating espera que el aumento de los tipos dé un impulso a los beneficios de la banca europea en 2022 y 2023.