La gestora de activos Invesco registró flujos de netos de 7.500 millones de dólares (6.889 millones de euros) en Europa en sus fondos indexados (ETFs).

A nivel de flujos, el año comenzó con dos meses muy sólidos, pero la invasión de Ucrania por parte de Rusia supuso un punto de inflexión y a partir de ahí el dinero fue saliendo de forma progresiva.

Ese escenario supuso una oportunidad para determinados segmentos de renta fija, cuyo crecimiento se aceleró de manera relevante en el transcurso del año. Los inversores apostaron por la compra de bonos del Tesoro de Estados Unidos, mientras que los flujos hacia los ETFs de renta fija europea se mantuvieron estables.

Por contraposición, la inversión en renta fija en China sufrió un significativo retroceso con más de 11.000 millones de dólares (10.086 millones de euros) en salidas en 2022.

Los ETFs de renta variable captaron casi 60.000 millones de dólares (55.016 millones de euros), aunque la caída del mercado provocó un descenso global de los activos bajo gestión.

La firma explica en un comunicado que las materias primas fueron la única clase de activo que se revalorizó durante el último ejercicio. La renta variable global y la estadounidense fueron las que más flujos captaron, mientras que Europa y Japón experimentaron salidas netas.

AUMENTO EN LAS ESTRATEGIAS ESG

El 61% de los flujos de entrada en fondos indexados (ETFs) el año pasado fueron a estrategias medioambientales, sociales o de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés), 10 puntos más que en 2021.

De esta forma, este tipo de ETFs representa ya el 18% de los activos totales en este tipo de activo, con 258.000 millones de dólares (236.654 millones de euros).