El producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos experimentó un incremento del 0,8% en el segundo trimestre, esto es el doble que el crecimiento del 0,4% del trimestre anterior, según la segunda estimación publicada este jueves por la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio.

La Oficina ha atribuido la mejora del PIB al aumento del consumo de los hogares, la inversión privada en inventarios y la inversión fija no residencial. De su lado, las importaciones se ampliaron.

En comparación con el primer trimestre, la aceleración del PIB en el trimestre se motivó, principalmente, por el repunte de la inversión en inventarios y del consumo. Estos movimientos se vieron compensados en parte por el retroceso de la inversión fija residencial.

En cifras anualizadas, el PIB estadounidense entre abril y junio avanzó un 3%, frente al 1,4% de los tres meses previos. La actualización de dos décimas al alza respecto del dato preliminar se debe a una revisión de la lectura del gasto de los consumidores, que fue parcialmente contrarrestada por el empeoramiento de la inversión fija no residencial, las exportaciones y los inventarios privados.