Bitcoin incluso preocupa en la Casa Blanca. Tanto es así, que, según las informaciones de Bloomberg, la administración de Joe Biden está ya trabajando en el establecimiento de una ley ejecutiva sobre las criptomonedas. Se trata de una directiva que encargaría a las agencias federales estudiar y ofrecer recomendaciones sobre la criptografía y que incluso, trataría la regulación financiera, la innovación económica, y cómo no, también la seguridad nacional de Estados Unidos.
Y es que todos se fijan en Bitcoin, aunque algunos, de nuevo más que otro. Y cada vez resulta más que curiosa esa dualidad que presenta JPMorgan sobre las criptomonedas . Su presidencia Jaime Dimon sigue siendo su azote, mientras que el banco de inversión sigue moviéndose a favor de ellas, en función de las demandas de sus clientes.
De hecho, uno de los revulsivos de los últimos días sobre Bitcoin pasa por las afirmaciones de su responsable de criptomonedas, Nikolaos Panigirtzoglou, quien afirma, que, con la subida de la inflación, como ya ocurriera hace unos meses con su explosión a máximos en el mercado, los inversores institucionales se vuelven a servir de Bitcoin como cobertura contra la subida de precios que deprecia a los activos.
Considera que hay señales en el mercado de que esa rotación de activos, que traspasó el interés del oro a Bitcoin en el último trimestre del pasado ejercicio ya principios de este año, está resurgiendo en las últimas semanas. Todo ello tras un primer movimiento de paso de Bitcoin a Ethereum, que ahora se traslada de nuevo en esa "legitimación" que se muestra en el gran cripto por parte de fondos y gestoras que colocan dinero en el activo. La falta de atractivo del oro es lo que propicia la mirada de los institucionales a Bitcoin.
Pero en el reverso tenebroso de JPMorgan, quedan de nuevo las declaraciones de su presidente Jamie Dimon que vuelva en contra de Bitcoin señalando que es el "oro de los tontos" , que no tiene valor intrínseco y que los reguladores van a endcer sus restricciones sobre la moneda virtual. Aunque eso sí, no ve en el panorama su ilegalización, porque cree que estará en el mercado durante mucho tiempo.
En su gráfica de cotización vemos que el valor se mueve con una recuperación del 16,39% en el mes los avances alcanzan el 24,2%. Ya en los tres meses precedentes, muestra avances del 67,1% y en el año gana ya camino del 100%. En concreto un 93,3% y en el último año, desde octubre del año pasado gana un 407%.
El otro gran revulsivo de los últimos días viene de la mano de Soros Fund Management.Los rumores que acompañan a que la compañía de inversión del financiero George Soros famoso que en los 90 hizo caer como nadie a la libra esterlina en los mercados, elevando su fortuna, está comprando Bitcoins en los últimos meses le ha llevado a sus niveles actuales.
De hecho, Dawn Fitzpatrick, la directora ejecutiva del fondo considera que el potencial de Bitcoin es muy elevado y que incluso va mucho más allá, a largo plazo, de una simple cobertura de inflación. No ha reconocido la cantidad de Bitcoin que tiene el Soros Fund Management, aunque señala que sí ha comprado, aunque no muchos.
Los indicadores premium de Estrategias de Inversión nos marcan un nivel de consolidación para Bitcoin, que se mueve a la baja en dos puntos y nos marca 6,5 de los 10 puntos totales posibles para el valor. En la parte negativa, destaca la tendencia bajista a medio plazo, el volumen de negocio a medio plazo, que se muestra decreciente y la volatilidad a medio plazo que es creciente para Bitcoin.
En el lado positivo , la tendencia a largo plazo, que es alcista , el momento total, en sus dos vertientes, tanto lento como rápido, que es positivo, el volumen creciente a largo plazo, y la volatilidad del valor, medida en términos de su rango de amplitud que es creciente a largo plazo.