No sabemos si Bitcoin tiene quien le escriba, como rezaba la novela de Gabriel García Márquez, pero sí quien le defienda. Y la esperada mesa redonda, organizada por Crypto Council for Innovation para hablar de la criptomoneda ha sido la piedra de toque que la divisa virtual necesitaba en este momento en concreto, para superar su gran bache en el mercado y esa cota psicológica, que ya era un lastre en sí misma: la cota de los 30.000 dólares con decisión, hasta superar los 38.000.
Ahora, el problema parece superado, al menos de momento con ese nuevo espaldarazo de figuras relevantes, el elixir que necesitaba la moneda digital para superar escollos, que alcanzaron, solo en un día un avance del 7,5% para el activo. Pero es que nuestra memoria de pez es tremenda: hace solo un año, el 24 de julio del pasado ejercicio marcaba cotas de 9.482 dólares, algo de lo que muy poco recuerdan ahora.
Solo ven los 64.788 dólares por activo del pasado 14 de abril, su récord histórico y fulgurante al calor de la normalización del valor como activo refugio, el calor de los grandes fondos, las peticiones de creación de ETFs y la entrada en juego del inversor minorista, cada vez más interesado en sus transacciones.
En la memoria más reciente, Bitcoin sube en los últimos cinco días un 9,26% y hoy lo hace por encima del 10%. El avance en el mes, supera ya los ocho puntos porcentuales. Sin embargo, el efecto caída se deja sentir en los recortes del 31,2% registrados en los tres meses precedentes. Y así se consolida el rebote del valor, que desde que comenzara el ejercicio avanza un 20,14%, que es en lo que han quedado sus avances tras un inicio de año espectacular, que se evidencia en el repunte del último año, de julio a julio, que alcanza el 261,5%.
Pero volviendo a la conferencia más esperada, lo cierto es que como es habitual, Elon Musk volvió a dar la campanada. Sus comentarios que relacionaban Bitcoin con Tesla, fueron como un bálsamo para el activo que logró salir de la senda bajista en la que estaba inmerso.
Pero también, como no hay que leer la letra pequeña, claro. Primero señaló que lo más probable es que su empresa de vehículos electrificados vuelva a aceptar la divisa virtual, que era lo más probable. Aunque agregó también la coletilla de, todo esto pasará cuando Bitcoin tenga un menor impacto medioambiental en la minería. La cota, 50% o más de energía renovable.
Además, señaló que tanto Tesla como SpaceX todavía poseen Bitcoins y no van a venderlos, por lo que espera que a medio y largo plazo la criptomoneda eleve su precio. A pesar de que sus declaraciones eclipsaron las demás, Jack Dorsey, el creador de Twitter y Square, esta última gran defensora de Bitcoin ha señalado que, si Internet tiene la oportunidad de crear una moneda nativa, para él es el Bitcoin.
Y respecto a los usos y costumbres poco sostenibles del entorno de la moneda, Dorsey destaca que las preocupaciones que existen sobre este asunto podrían llevar a las empresas a la creación de nuevas soluciones en el futuro. Cathy Woods, la artífice de los fondos y ETFs ARK, destacó que a su juicio Bitcoin llegará a ser más ecológico, y lo hará por encima de los servicios financieros tradicionales e incluso del oro, en el futuro claro.
Mientras Anthony Scaramucci, fundador de Oscar y de SkyBridge Capital ha señalado en la CNBC que Bitcoin cotizará para final de año en los 100.000 dólares. Y también hemos conocido estos días que ya un 13% de los americanos hizo trading con criptomonedas el pasado año frente al 24% que lo hizo en acciones, según una encuesta de la Universidad de Chicago.
Por si esto no fuera suficiente, en las últimas horas han surgido los rumores sobre amazon y la posibilidad de que acepte criptos en el pago online, lo que ha vuelto a disparar un 10% más, como ahora sucede a Bitcoin
Pero no todo es de color de rosa para Bitcoin, porque la regulación le sigue por donde pasa. La Comisión Europea ha propuesto la prohibición de toda aquella transacción que sea anónima con Bitcoin. De momento solo es una propuesta legislativa para luchar contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo. Además, incluye la limitación de los pagos en efectivo a menos de 10.000 euros con criptodivisas.