De esta manera, el grupo siderúrgico español da por cesadas las negociaciones para una posible fusión entre ambos grupos, que daría lugar a un 'gigante' del sector.
El pasado viernes, ambos grupos confirmaron que "recientemente" habían entablado conversaciones "muy preliminares" con respecto a esta posible operación entre ambos grupos, aunque subrayaron que no había certeza de que se llegara a tal acuerdo "o, de ser así, en qué términos".
En distintos comunicados al mercado, las compañías indicaron que el análisis de la posible operación se encontraba "en una fase muy inicial, no existiendo en este momento acuerdo alguno sobre su estructura, perímetro y términos".
"No hay certeza acerca de que las partes lleguen a un acuerdo ni, en su caso, en qué condiciones", dijo Acerinox en un comunicado a la CNMV, mientras que Aperam añadió que, de conformidad con sus obligaciones legales, informará al mercado "cuando sea necesario".
Hace dos años, la Comisión Europea decidió prohibir la creación de una 'joint venture' entre Tata Steel y ThyssenKrupp para aglutinar sus negocios de acero en Europa.
La familia Mittal es el principal accionista del gigante siderúrgico ArcelorMittal, que controla en torno al 40% de los derechos de voto de Aperam. Mientras, Corporación Financiera Alba es el principal accionista de Acerinox, con casi un 18% de su capital.
Junto a la familia Mittal, en su accionariado destacan M&G Investment Management, con un 4,67%; así como Dimensional Fund Advisors (2,3%) o BlackRock (1,7%).
En el caso de Acerinox, además de Financiera Alba, sus principales accionistas son el empresario Daniel Bravo, con el 5% del capital, y la sudafricana Industrial Development Corp. (IDC), con el 3,26%.
Las acciones de Acerinox ceden algo más de un 1,7%, hasta los 11,61 euros mientras que Aperam cede más de tres puntos porcentuales, hasta los 38,38 euros por acción.