Kristina Hooper, estratega de Allianz GI, afirma que“las elecciones presidenciales tienen el potencial de afectar negativamente a los mercados en el corto plazo. Dependiendo de cual sea el resultado de la carrera al Congreso, el nuevo presidente podría ser incapaz de poner en marcha sus programas. En cualquier caso ambos candidatos tienen previsto incrementar el gasto fiscal, lo que podría ser bueno para la economía –particularmente ahora que no parece tan claro cómo es de efectiva la política monetaria. Los inversores podría intentar adoptar la postura de esperar y ver para apostar por algunos sectores”. En la firma consideran que hay un sector que podría beneficiarse sea cual sea el partido que gobierne finalmente, las infraestructuras.
Fuente: Allianz GI
En cualquier caso, dice Hooper, los inversores deben esperar un aumento de la volatilidad conforme nos vamos acercando a la elección.
Fuente: Allianz GI
Los estrategas de Goldman Sachs que dirige David Kostin, apuntan también al aumento del gasto que proponen ambos candidatos y apuntan por apostar por sectores defensivos y fabricantes de materiales de construcción. Entre las empresas que destacan esta firma destaca Vulcan Materials, Martin Marietta Materials, Summit Materials e Eagle Materials.
Por el contrario, un sector que sigue en riesgo si Clinton entra al despacho Oval es el de las farmacéuticas. Ya hace un año que avisó de que si era presidenta lucharía contra los precios de los fármacos. Por otro lado, las compañías que se han visto beneficiadas por el Obamacare –la ley estrella del actual presidente-, podrían sufrir si gana Trump.
Por su parte, el economista jefe de Unicredit cree que en las últimas semanas han aumentado las posibilidades de que gane Trump y ante esto apuesta por protegerse ante el aumento de la incertidumbre que afectará a los mercados de cara a las elecciones. Además, cree que sería buena idea comprar compañías cuyos ingresos dependan de los gastos del gobierno
Aprovechar el mal comportamiento de las defensivas para comprar en bolsa.
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Por último Citi afirmaba hace solo un día que ante la posibilidad de que Trump se alce con la victoria, una de las mejores formas de proteger nuestra cartera es al viejo estilo, comprar oro. En su opinión, los analistas explicaban que la onza podría moverse entre los 1.300 y los 1.350 dólares la onza hasta la decisión de la FED en diciembre, aunque podrían subir si gana el candidato republicano de melena rubia.
Por cierto, los expertos de AXA IM han preparado este gráfico en el que explican cuál es la relación del comportamiento del S&P 500 y las elecciones.
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