La tecnología está cambiando la banca tal como hoy la conocemos. Surgen nuevas tendencias, cambian los hábitos de los clientes y nacen duros competidores. Los pronósticos indican que en 2010 habrá unos 21.000 millones de dispositivos conectados y el 70% de los servicios financieros se contratarán por canales digitales. Un ecosistema en constante evolución que exige ser ágil y adaptarse con rapidez a las nuevas reglas del tablero.
El reto del Grupo Santander es muy ambicioso: liderar la banca digital del futuro y ser la mejor plataforma abierta de servicios financieros. Y para ello, está combatiendo a los denominados ‘neobancos’ en su propio campo de juego: la tecnología y la innovación. Es aquí donde se encuadra la creación de Santander Global Platform, una unidad que cuenta con cerca de 600 empleados y aglutina bajo el mismo paraguas todos los servicios digitales globales que ofrece el banco: Openbank, el banco 100% digital del grupo, y Open Digital Services; la plataforma de pagos Global Payments Services, que incluye Superdigital, PagoFX y negocios globales de reciente lanzamiento como Global Merchant Services y Global Trade Services; y Digital Assets, para ayudar en la transformación digital (Centros de conocimiento Digital, InnoVentures y Activos digitales).
“Nuestro objetivo es extender los beneficios de la escala del Grupo a los negocios de pagos y digitales de mayor crecimiento, construyendo plataformas una sola vez para todos nuestros bancos, que nos permitan ofrecer mejores servicios digitales orientados a clientes particulares, comercios y pymes”, ha señalado Ana Botín, presidenta del grupo. La decisión de invertir 20.000 millones en tecnología en cuatro años (empezando por 5.600 millones en 2019) no deja lugar a dudas de que el gigante financiero español apuesta fuerte por ser protagonista del cambio. El fin último: mejorar la experiencia del cliente y aumentar su confianza y vinculación. Botín es la principal defensora de esta revolución: “Estamos preparando a Santander para aprovechar las enormes fortalezas que tenemos, como la tecnología, el talento y el tamaño. Esto nos ayudará a aprovechar al máximo las oportunidades que nos trae la innovación digital y ser líderes del sector financiero en la próxima década. Nuestras inversiones en digitalización y tecnología nos permitirán mejorar la experiencia de cliente, y aumentar el crecimiento y la rentabilidad”.
De esta inversión, una de las mayores de la banca internacional, la plataforma más importante será la de pagos. Con un crecimiento esperado de ingresos en torno al 9% anual, los mecanismos de pago ofrecen "una oportunidad única para cualquier entidad financiera", como recalcan fuentes del banco. Dentro de Global Payments Services, las prioridades en la estrategia para este año
son:
- Superdigital: dirigida a la población no bancarizada, ya que permite hacer ingresos, sacar dinero o hacer pagos aunque no se disponga de una cuenta bancaria. Tras la experiencia en Brasil, en una primera fase se está implementando en México y Chile. Actualmente cuenta con más de 500.000 usuarios activos.
- PagoFX: tiene como objetivo la creación de una aplicación para el mercado abierto, con transferencias internacionales a bajo coste, transparentes, en el mismo día o en el siguiente. Se espera lanzar en una primera fase en tres países europeos.
- Global Merchant Services: tiene el objetivo de desarrollar una solución global de adquirencia, segmento que actualmente cuenta con más de un millón de clientes activos. Aprovechando las capacidades de Getnet en Brasil, se implantará en una primera fase en México, seguido del resto de Latinoamérica.
- Global Trade Services: destinado a ser el socio de las más de 200.000 empresas clientes del banco, que crecen y realizan negocios internacionales. El objetivo es el desarrollo de la plataforma en 2019 y extenderla en el Reino Unido, España, Brasil y Chile. Se espera en el futuro captar negocio en el resto de geografías donde opera el grupo y en el mercado abierto.
En cuanto a Openbank, que ya cuenta en España con una base de 1,2 millones de clientes, el grupo tiene previsto exportar su tecnología de alta generación -basada en la inteligencia digital y el machine learning- a otros países. Para su expansión utilizará Open Digital Services, una nueva plataforma bancaria con una cartera completa de productos para particulares. El salto a Alemania ya está dado y las siguientes paradas en el viaje serán Holanda, Portugal, Argentina y México.
Por último, la estrategia digital del Santander contempla el desarrollo de los Centros de Conocimiento Digital, donde se apalanca la escala del grupo asegurando que todos los países tienen acceso a las tecnologías más innovadoras. También dentro de Digital Asset se integra Santander Innoventures, el fondo para emprendedores fintech. Con 200 millones de uros para inversiones en capital, este fondo ya ha invertido en 25 proyectos, tres de ellos en las últimas semanas: Trulioo, Securitize y Klar.
Además, la entidad sigue avanzando en Globile, una plataforma común para móvil, con más de 20 componentes implementados en 6 países, así como con Open Platform, que se constituye como una nueva plataforma tecnológica en la nube para el desarrollo de proyectos corporativos.