En un evento celebrado hoy, Francisco Javier Abajo Dávila, director General de Industria, Energía y Minas de la Comunidad de Madrid, ha entregado el galardón a Daniel Muñoz Sanz, director de Geotermia y Eficiencia Energética de Sacyr Industrial.
El jurado ha destacado la contribución del proyecto “al ahorro y la eficiencia energética, su originalidad y creatividad, la aplicación del sistema instalado a los cambios tecnológicos futuros a un coste moderado, la mayor y mejor integración del sistema al edificio y el mayor impacto y repercusión social”.
Sacyr Industrial, referente en geotermia
Este nuevo reconocimiento es un respaldo a la calidad del trabajo de Sacyr Industrial, una empresa que está comprometida con esta tecnología sostenible e innovadora y que es pionera en el uso de forjados activos y cimentación termoactiva.
Entre los hitos de Sacyr destaca la realización de la mayor instalación del sur de Europa y segunda de Europa (Hospital de Sant Pau, Barcelona), el mayor muro pantalla termoactivo de Europa (Mercado de Sant Antoni, Barcelona), la mayor instalación geotérmica residencial. Además es líder en MW instalados y número de sondeos perforados.
El proyecto de la Fundación Biodiversidad
La instalación geotérmica realizada en el edificio de la Fundación Biodiversidad en la calle Peñuelas, 7 forma parte de la rehabilitación integral de este inmueble de 1945, que es la suma de varios locales con una superficie útil de cerca de 1.000 m2.
La solución geotérmica utilizada es una tecnología que aporta una elevada versatilidad y da respuesta a las necesidades energéticas, técnicas y económicas de esta rehabilitación integral.
Las perforaciones geotérmicas se llevaron a cabo bajo una cubierta de estructura metálica de 1945 con elevado valor histórico y arquitectónico. Se hibridó tecnología geotérmica con tecnología aerotérmica para garantizar que el rendimiento estacional global se mantiene dentro de los límites de la generación mediante fuentes renovables. Esta es una solución única porque no presenta las emisiones in situ y reduce el exceso de ruido dentro del umbral admisible.
La instalación para la climatización consiste en un campo de captación de seis sondeos de 120 metros de profundidad y una bomba de calor geotérmica de 50 kW de potencia calorífica y 36 kW de potencia frigorífica, con lo que se cubre más del 75% de la demanda del local. Además, como espacio multiusos se prevén picos de muy alta ocupación, para lo que se ha realizado un sistema híbrido con un equipo aerotérmico de 74 kW de potencia calorífica y 66 kW de potencia frigorífica.