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La obesidad es uno de los principales problemas de salud en la sociedad actual. A lo largo de los últimos 25 años, la población obesa en España se ha incrementado, siendo uno de los países de la Unión Europea con mayor incidencia. En concreto, la sufre un 14% de la población, según datos del Instituto Nacional de Estadística en 2022 y, en Aragón, esta cifra se eleva hasta el 18,7%. 

Por este motivo, en el marco del Día Mundial contra la Obesidad, que se celebra mañana, 4 de marzo, Quirónsalud Zaragoza quiere advertir de los problemas que provoca esta enfermedad crónica, la cual se define como el aumento patológico de grasa en nuestro organismo, algo que afecta a la práctica totalidad de los órganos. 

Para hacer frente a esta patología, la Unidad de Cirugía Metabólica del centro hospitalario cuenta con una dilatada experiencia y tecnología de última generación. En octubre del año  2000 el doctor Jorge Solano, jefe de la Unidad de Cirugía Laparoscópica Avanzada de  Quirónsalud Zaragoza, realizó la primera intervención de bypass biliopancreático por laparoscopia, convirtiéndose en uno de los primeros cirujanos en utilizar este tipo de técnicas para tratar la enfermedad. A lo largo de estos años, se han conseguido grandes avances en esta área, siendo, en los casos más severos o con trastornos asociados, la solución más segura y rápida, ya que gracias a ella se pierde entre el 75% y el 90% del exceso de peso en la mayoría de pacientes

En cuanto a la operación, el especialista indica que “existen diversas técnicas y, por ello, en Quirónsalud Zaragoza, aplicamos la que mejor se adapta a las características y a los objetivos que quiere lograr cada persona en particular, así como a sus hábitos y rutinas a la hora de comer”. "La misma intervención no sirve para todos, por lo que es necesario individualizar el tratamiento”, destaca.

Asimismo, se trata de una cirugía mínimamente invasiva que dura de 30 a 40 minutos. “El paciente -continúa el doctor- permanece ingresado alrededor de 48 horas y recibe el alta laboral entre una y tres semanas después. El primer día normalmente ya puede pasear y, a partir de la tercera semana, realizar casi todo tipo de ejercicio físico. Además, deben llevarse algunos controles dietéticos y analíticos”. Con respecto a los cambios físicos, el especialista Jorge Solano explica que “se puede perder entre 8 y 15 kilos durante el primer mes. Igualmente, los problemas asociados mejoran y la mayoría, como la diabetes tipo 2 o la apnea del sueño, remiten”. 

¿Cuándo está indicado este tipo de cirugía? 

Esta clase de cirugía se determina mediante el índice de masa corporal (IMC), que relaciona  peso y altura. En este sentido, se puede hablar de sobrepeso cuando el IMC está entre 25 y 30 y de obesidad a partir de 30. Si el IMC es de 40 o más, se llama obesidad mórbida. “Sin  embargo, en el momento actual, estos parámetros están evolucionando, ya que  encontramos pacientes con menos sobrepeso que sufren problemas derivados de la  enfermedad y deben ser considerados como mórbidos”, señala el doctor Jorge Solano. 

“La cirugía metabólica es muy segura, con cifras mínimas de complicaciones, de hecho tienen más riesgo para nuestra salud los trastornos derivados de la obesidad que la propia intervención”, asegura. En este sentido, los parámetros para realizarla se han ampliado: “Ahora operamos con menos sobrepeso que hace años. Así, hoy en día, la llevamos a cabo a partir de un IMC de 30 si el paciente tiene otras patologías derivadas. En cambio, para quienes no sufren otras enfermedades relacionadas, está indicada a partir de un IMC de 35”, concreta el especialista. “No obstante -continúa-, estos conceptos están cambiando y, actualmente, se puede indicar en personas con obesidad en las que es previsible que aparezcan dichas patologías asociadas”. 

Cómo afecta la enfermedad a la salud 

Entre las consecuencias que produce, se encuentran la insuficiencia cardíaca, los problemas respiratorios, la diabetes tipo 2 y la hiperlipemia (nivel alto de grasa en sangre, como el colesterol o los triglicéridos). “Además, quienes padecen obesidad tienen una edad metabólica mayor a la biológica, lo que disminuye la calidad de vida y acelera algunos trastornos, tanto en personas mayores como en jóvenes”, concluye Jorge Solano.